Begoña González | Martes 21 de abril de 2015
El Baix cuenta con el tramo más peligroso de Cataluña y aporta cuatro vías al Top-10 de las más accidentadas
La densidad de población y los accesos a Barcelona hacen que la movilidad sea parte intrínseca, casi inherente, del Baix Llobregat. Lo negativo: cuatro de las diez vías con más accidentes al año se encuentran en nuestra zona, lo que representa un mayor reto, si cabe, en una materia en la cual se ha mejorado mucho en los últimos años pero que sigue siendo insuficiente. Una víctima mortal en las carreteras siempre será un objetivo incumplido.
Las más accidentadas
La primera de las vías más accidentada es el tramo de la C-31 entre El Prat de Llobregat y L’Hospitalet, a la altura de la cochera de TMB (también en accidentes de motos y ciclomotores). Pese a los radares colocados para la reducción de la velocidad, que pasa de 100 a 80 km/hora, los accidentes se siguen dando en este tramo de 7’4 km y por donde pasan 84.060 vehículos al día.
El cambio de velocidad y algunas incorporaciones peligrosas son el motivo. Si salimos de El Prat, sentido Barcelona, justo a la altura del río Llobregat, el giro es de 90º, naciendo un tercer carril. La línea continua impide, a priori, incorporarse en este punto a la Gran Via, algo que no todo el mundo cumple. Al otro lado, el acceso a la gasolinera que se encuentra a esta altura y la incorporación de los que vienen del Hospital Universitari de Bellvitge coinciden siendo uno de los principales puntos negros de este tramo.
El segundo de los tramos con más accidentes también parte de esta zona. Se trata de la C-31c que enlaza El Prat de Llobregat con la ciudad vecina de Sant Boi. Con tan solo tres kilómetros de longitud, esta variante es el quinto tramo con más accidentes al año. Según el estudio, 34.785 vehículos pasan cada día por aquí. Sin embargo, mantiene algunas ineficiencias. Incorporaciones peligrosas, pocos arcenes, una mediana de cemento de medio metro casi pegada al carril rápido son algunos ejemplos. Los cambios de nivel de la vía, con varias subidas y bajadas pese a su corta longitud, sus curvas y la circulación a velocidades superiores a la permitida (80 km/h) explican la quinta posición de esta vía.
La C-245 entre Cornellà y Esplugues, sexta, y la misma BV-2041 entre Gavà y Begues, novena, completan la lista de tramos del Baix.
La más peligrosa
Pese a esto, es la carretera que une Gavà y Begues, nuevamente, por tercer año consecutivo, la considerada, por coeficiente, como la más peligrosa de Cataluña según el estudio EuroRAP presentado por el RACC en este 2015. La alcaldesa de Gavà, Raquel Sánchez, pidió mejoras urgentes en la carretera BV-2041, que une la localidad con Begues en enero de 2015 pero aún continúan sin apreciarse cambios. Sánchez dirigió una carta al conseller de Territori i Sostenibilitat, Santi Vila, en la que mostraba su “preocupación” por la peligrosidad del tramo de esta carretera entre Gavà y Begues “que sigue siendo, según los estudios, la vía de más riesgo de accidentes de Catalunya, concretamente en la salida de la urbanización del barrio de Bruguers”, en referencia al estudio EuroRAP presentado por el RACC en enero de 2015.
Cambios insuficientes
En la carta, la alcaldesa aseguraba que a pesar de las mejoras ejecutadas en los últimos meses, la salida “continua siendo peligrosa y valoramos la necesidad de colocar un semáforo y otras medidas oportunas”. La alcaldesa se refiere a las últimas actuaciones realizadas en la vía en respuesta a estos datos, según ella, insuficientes.
El departamento de Territori i Sostenibilitat ha realizado trabajos de mejora de los aspectos de seguridad que han consistido, básicamente, en la separación de los sentidos, reduciendo también el ancho de los carriles para aumentar la sensación de velocidad en unos tres kilómetros de la vía; es decir, la mitad del tramo total.
Por otro lado, un ‘cebreado’ pintado de un ancho de 0’60 cm, con marcas rugosas y reforzado con señales reflectantes a lo largo de la calzada, pondrá distancia entre los dos sentidos contrarios para evitar posibles choques frontales. En una segunda fase, se reforzará la señalización en las curvas, así como la circulación habitual de ciclistas.
Por su parte, Sánchez se remitió al acuerdo aprobado por la junta de gobierno para solicitar a la Generalitat un conjunto de acciones que resolvieran la problemática porque el acuerdo recoge las peticiones de los vecinos del barrio de Bruguers que consideran que la salida continúa siendo peligrosa y que no son suficientes las medidas adoptadas hasta ahora.
El director de Infraestructuras de movilidad terrestre de la Generalitat, Xavier Flores, ha asegurado que ya están trabajando en estos tramos y que por ejemplo en la BV-2041 han encargado inspecciones de seguridad y han iniciado mejoras en la señalización. “El estudio nos dice que hay que trabajar intensamente, y lo estamos haciendo”, ha indicado Flores, que hace una valoración positiva global pero que considera que hay que trabajar en estos tramos para tener mejor resultado, con acciones focalizadas. III