La colaboración entre universidad y empresa ha vuelto a ser reclamada por los directivos y propietarios de compañías de L'Hospitalet y el Baix Llobregat en el transcurso de la conferencia- coloquio que este viernes ha pronunciado el rector de la Universidad Politécnica de Catalunya (UPC), Enric Fossas en el foro empresarial Llobregat organizado por la patronal AEBALL. Rosa Fiol, directora de la organización empresarial que tiene en su seno a la patronal metalúrgica del territorio, ha reconocido la existencia de un 40% de empresas de este sector "con procesos muy maduros y mecánicas tradicionales" que si no logran modernizarse con nuevos productos "acabarán mal".
Para evitarlo, Fiol reclamó la colaboración de la UPC con el objetivo de que parte de esas empresas puedan reorientarse hacia subsectores como el de la biotecnología, siguiendo el ejemplo de Avident, que de producir tornillos para la industria ahora triunfa en el mundo de los implantes odontológicos. En ese sentido, la directora de AEBALL propuso que la UPC colabore en el cluster biomédico de L'Hospitalet, donde la Universidad de Barcelona ya está implicada junto al Ayuntamiento de esa ciudad, para que la especialización tecnológica de la UPC aporte nuevos productos, maquinaria y soluciones en el campo de las ciencias de la salud.
El rector de la Universidad Politécnica de Catalunya (UPC), Enric Fossas, que también preside la Asociación Catalana de Universidades Públicas (ACUP), respondió que las dos universidades en Biopol pueden ser complementarias y, sin negar esa colaboración, tampoco se mostró entusiasmado, aunque subrayó que "desde la universidad debemos ser capaces de acceder a las pymes para plantear soluciones" a los problemas que tienen.
Barreras para la colaboración
Entre estas barreras existentes para la colaboración entre pymes y la universiad, Fossas ha citado la falta de estructura de Investigación, Desarrollo e Innovación (I+D+i) en este tipo de compañías, la falta de percepción de la universidad como agente clave del ecosistema o el hecho de que todavía se tiene la imagen que la universidad tiene una estructura compleja y de difícil acceso. No obstante, actos como el encuentro de este viernes son, a su juicio, una forma de acercamiento.
Otra manera se encuentra en los actuales intentos por simplificar, facilitar y acercar los proyectos de transferencia tecnológica mediante la creación de un centro de innovación y tecnología que aglutina los trabajos de una veintena de grupos tecnológicos, el CIT UPC.
El programa de doctorados industriales, vía que aprovechan las empresas para captar los mejores profesionales, los convenios de cooperación o los concursos de ideas son otras fórmulas de transferencia tecnológica. Fossas ha explicado varios ejemplos de colaboración con empresas grandes como Repsol o Seat, y casos de éxito como Nice Fruits, Avinent o Girbau
En cuanto al Govern, el rector de la UPC ha reclamado al Govern que "debería haber una política de industria e innovación independiente mande quien mande. Hay un acuerdo para que pase algo parecido a lo que hemos visto en el campo de la investigación y que se sigan unos mismos criterios de financiación independientemente del partido que ocupe el gobierno de la Generalitat". En este sentido, ha apuntado que ha habido visiones "opuestas" de lo que supone la I + D en los diferentes gobiernos. Fossas ha revelado que la conselleria de Economía y Conocimiento del gobierno de Artur Mas pregonaba un modelo inspirado en Israel y la creación de nuevas empresas innovadoras, mientras que la consejería de Industria del tripartito se centraba en velar por el tejido existente. "Debe producirse un término medio que contemple una cosa y también la otra", ha remarcado.
Acceso de la pyme al conocimiento
Fossas ha explicado que la mayor parte de las medianas y grandes empresas cuentan con departamentos de investigación internos, y es a través de ellos que se relacionan con la universidad para plantearles las necesidades que tienen. Esto "es muy diferente" cuando se trata de pequeñas empresas, sin estructura de I + D + i, ya que hay un intermediario que haga de enlace entre las necesidades empresariales y las soluciones de los investigadores.
Este papel, detalló, es lo que deberían haber asumido los centros públicos, pero lamentó que esto no ha sido así en los últimos años. Sin embargo, confía en que la creación del Eureca, resultado de la integración de los seis centros tecnológicos avanzados de Cataluña, represente un cambio en este sentido. "Tenemos que participar para resolver esto, ser capaces de acceder a este colectivo, interpretar los problemas que existen y plantearles nuestras soluciones", ha dicho el rector; que ha avisado de que "sin innovación la pyme no puede ser un agente productivo competitivo". Mientras no llega una solución desde la Administración, destacó que la UPC ha puesto manos a la obra mediante vinculaciones con asociaciones empresariales como la Aeball, en el caso de la zona de L'Hospitalet y el Baix Llobregat, así como con la creación de "mecanismos internos ágiles" para ofrecer soluciones a las pequeñas empresas.
Algunas de ellas se canalizan a través del Centro de Innovación Tecnológica de la universidad, el CIT UPC, que busca "simplificar la relación" para incrementar la transferencia tecnológica. "Demasiado a menudo las universidades aparecemos en la prensa con la cola que somos muy teóricos y lentos respondiendo. No sé si esto ocurre de forma generalizada, pero en el caso de la UPC sabemos que existen unos plazos y unos objetivos y satisfacer. Nosotros adquirimos compromisos firmes", ha concuido.
Una relación win-win
La colaboración entre las empresas y la universidad debe ser un objetivo común, según el rector, ya que las dos partes salen ganando. "Es una relación win-win", remachó. En este sentido, ha señalado que las dos organizaciones mejoran su imagen cuando colaboran. Además, agregó, las empresas se nutren de los conocimientos y el talento universitario, mientras que los centros pueden aprovechar los problemas que salen sobre el terreno como base para desarrollar su conocimiento.