OBS concluye en un informe que la aportación económica del evento de tecnología mundial supone un 25% del total anual generado por Fira de Barcelona, institución ferial que representa el 1,2% del PIB de Cataluña.
El Mobile World Congress 2016 reunirá hasta el jueves a más de 95.000 profesionales del sector de las telecomunicaciones móviles en el recinto de Gran Vía de Fira de Barcelona. Las empresas participantes generarán un impacto económico de 460 millones de euros, 24 millones más respecto a la estimación de 2015. Esta cuantía económica supone un 25% del total anual que registra Fira de Barcelona, según un informe del OBS Business School titulado “Impacto económico de los eventos mundiales”.
MWC genera 3.000M€ para la economía local
El estudio concluye que los eventos de gran escala se han convertido en dinamizadores de la economía y un claro ejemplo es el Mobile World Congress. Hugo Zarco, director del informe de OBS, subraya que estas jornadas, como la del MWC, “promocionan la economía y el atractivo turístico, ya que son capaces de trascender las fronteras nacionales, contribuir al desarrollo del patrimonio urbano y a la transformación de los entornos”.
Zarco remarca que la gran cita tecnológica ha generado, desde 2006, más de 62.000 empleos temporales y 3.000 millones de euros para la economía local. La edición de 2015 consiguió retornos impositivos de 782 millones de euros anuales por parte de la Hacienda Pública. Los eventos de restauración, alojamiento y tecnología son los que aportan un mayor impacto económico, un 9% cada uno, a Fira de Barcelona, organización que registra el 1,2% del PIB de Cataluña (2.360 millones de euros). A excepción del MWC que genera un impacto del 25%.
Evento de “magnitud reducida” con más ingresos
La actividad económica vinculada a la Fira se ha traducido en la creación de 40.580 puestos de trabajo en 2015. El 43% se produjeron en el sector de la restauración, alojamiento, comercio, transporte y ocio. La repercusión de los eventos es continua durante todo el año, lo que genera un impacto positivo y notable para la “marca” Barcelona. Los efectos no económicos impulsan la cohesión social, la multiculturalidad y el posicionamiento de la ciudad y su área metropolitana.
El Mobile World Congress es un evento de “magnitud reducida” porque se desarrolla en espacios abiertos que permiten registrar mayores ingresos dada su capacidad para atraer a un mayor número de visitantes, más participación ciudadana y obtienen un buen impacto mediático. Los festivales de música, como el Sónar, también pertenecen a esta categoría porque generan más de 50 millones de euros, y crean 216 empleos permanentes y 2.500 temporales.
JJOO, sin éxito económico en Barcelona
Los Juegos Olímpicos son un ejemplo de evento en el que “a mayor magnitud del evento, mayores serán los recursos destinados por los sectores público y privado” apostilla Hugo Zarco. El efecto sobre el PIB en estas jornadas deportivas es positivo, excepto en Barcelona donde cae el Producto interior bruto al -2,5%, la inversión se ve afectada por la burbuja especulativa, y la tasa media de ocupación baja al -1,3%.
El OBS también ha analizado el impacto de mega-eventos como la Super Bowl o la Copa Mundial de Futbol que conllevan mayores ingresos que los Juegos Olímpicos, pero generan un menor número de puestos de trabajo. La jornada mundial de la juventud, en la que el Papa visitó la capital de España, supuso un total de 354.3 millones de euros, importe que beneficio en su mayor parte a la Comunidad de Madrid. El informe detalla que los visitantes extranjeros gastaron más de 147 millones de euros durante su semana. El evento permitió un crecimiento de la ocupación hotelera del 12,1%.