En este evento paraguas –toco madera- caben propuestas para todos los gustos: música, literatura, teatro, deporte, patrimonio, gastronomía, etc. El pistoletazo oficial de salida se producirá el jueves 21 de abril, con el pregón tradicional a cargo del cantante nacido en el barrio de Bellvitge, Dani Flaco. No en vano, la música ocupa un lugar destacado en el programa festivo, que este año contará con artistas de la talla de Hombres G, Antonio Orozco, Boni, Los Suaves y Loquillo. Para presupuestos limitados, se siguen organizando conciertos gratuitos, que en esta ocasión se celebrarán en el parque de Can Buxeres. Y para gustos más especializados, el ciclo Primavera in Black ofrece propuestas musicales de pequeño formato vinculadas al jazz, el blues y la música negra en los jardines de Can Sumarro.
Las letras también ocupan un espacio privilegiado dentro de la programación, aunque sólo sea porque el 23 de abril se celebra Sant Jordi y el Día de Libro. Esa jornada toca pasearse por Las Ramblas y disfrutar del perfume de los libros y las rosas. Por allí andará también el ganador de la décima edición del Premio Internacional de Novela Negra L’H Confidencial, Vladimir Hernández. Y al que no le guste leer, siempre puede acudir a alguna representación teatral, donde se encarnan las letras en voz y cuerpo, como las que acoge el Festival del Humor; o las cápsulas de teatro, que se celebrarán en Santa Eulàlia.
Estos días también son una excelente oportunidad para conocer espacios por los que hay que pagar entrada o que habitualmente se encuentran cerrados al público. Las jornadas de puertas abiertas permitirán conocer de primera mano los polideportivos municipales, que por cierto están fomentando la práctica del deporte y la vida saludable a través de diferentes retos y sus correspondientes premios. Y también se podrán visitar el Museo de L’Hospitalet o el Palacete de Can Buxeres, entre otros lugares.
Y si a alguien se le ha abierto el apetito, en sentido literal, siempre puede acudir a la ruta gastronómica de la Primavera de Tapas, celebrar la Noche de Tapas en el Mercado del Centro o tomarse un vermut de Sant Jordi, entre otras propuestas.
Entre la tradición y el progreso
Eso sí, que nadie se indigeste, que la oferta cultural de L’Hospitalet se ha mantenido antes y se prolongará después de las Fiestas de la Primavera. Un ejemplo de lo primero podría ser la celebración de los 50 años del nombramiento de L’Hospitalet como Ciutat Pubilla de la Sardana.
En la recepción oficial celebrada el 17 de abril se ha recordado y homenajeado a los hombres y mujeres que lucharon por mantener la cultura catalana en un entorno político hostil. De hecho, durante el acto se ha mencionado cómo hubo que pedir permiso a la autoridad de entonces para poder celebrar el nombramiento realizado por parte de la entidad barcelonesa Obra del Ballet Popular. “Que lo paséis bien y disfrutad, muchachos”, dicen que fue la respuesta espontánea del gobernador civil. La oficial llegó cuando ya había pasado el acto, por si ocurría algún incidente y había que culpar a alguien de algo. Afortunadamente, aquellos tiempos han pasado y L’Hospitalet exhibe con orgullo el haber sido la primera ciudad del Barcelonès en recibir dicha distinción y la séptima de toda Catalunya.
Dicha gesta, ocurrida en una ciudad tradicionalmente plural y diversa, ha sido puesta en valor por las autoridades municipales, que han agradecido y felicitado a los allí presentes el trabajo realizado en pro de la cultura hospitalense y catalana. La presidenta de la Coordinadora Sardanista de L’Hospitalet, Mercè Tubau, se ha sumado al reconocimiento y ha entregado una réplica de la escultura “El músico solitario” a quienes han contribuido a mantener esta tradición popular.
Sólo un móvil ha realizado alguna foto, aparte de las de los fotógrafos profesionales. La media de edad podría situarse entre los 50 y los 60 años, si no más. Es el reto de los sardanistas contemporáneos. Minutos antes de la recepción, un pequeño grupo comenta que los niños aprenden a bailar sardanas -600 cada año, según la alcaldesa-, pero que luego, cuando son mayores, se desentienden. Explican también que el baile tradicional catalán tiene un origen muy antiguo y que Pep Ventura reformó dicha danza para adaptarla a los nuevos tiempos. Tal vez haga falta un nuevo reformador que atraiga el interés de los más jóvenes, les comento. Ellos me invitan a pasarme por el parque de la Marquesa el 15 de mayo, donde se celebrará el cuarto encuentro de la sardana.
Nadie puede predecir lo que pasará en el futuro, aunque este fin de semana también se ha celebrado otro evento que revela el camino por el que se desarrolla nuestra cultura: el primera Salón de Redes Sociales. Organizado por Barcelona Community, 2.000 metros cuadrados de La Farga han sido testigos de actividades relacionadas con la comunicación interpersonal a través del mundo virtual. No diré que las relaciones que allí se establecen sean algo totalmente diferente a la “germanor” (hermandad) de la que hacen gala los sardanistas, pero desde luego que el contraste es intenso. En todo caso, la oferta cultural de la ciudad sigue siendo de lo más variada, apta para todos los gustos, por lo que tiene sentido hablar de Fiestas –en plural- de la Primavera. Y que duren muchas más.