Ropa de abrigo, gorro, guantes o paraguas forman parte de nuestra indumentaria habitual, que sea dicho de paso, es lo normal en esta época del año en la que nos encontramos. Algunos, sin embargo, no estamos muy acostumbrados a estas temperaturas, especialmente, los vecinos de Castelldefels que gozan con fortuna de un micro-clima que les otorga casi 300 días de sol al año.
Pero no ha sido el frío lo que ha dejado helados a muchos de los ciudadanos de esta localidad costera, sino la actuación de algunos políticos locales que cada día se alejan, como si de un cohete se tratará, de la realidad social de la ciudad. Muchos, nos enterábamos con estupor, como ERC anunciaba que se incorporaban los concejales de CIU al gobierno municipal, lo que suponía reforzar el independentismo en el gobierno de Castelldefels. Que ERC se alegre de que haya más separatistas es algo que cabe esperar lamentablemente, pero la gran sorpresa la dio el Partido Socialista, congratulándose de la nueva incorporación y no desmintiendo lo anunciado por ERC.
Son muchos los vecinos de Castelldefels que lamentan y están consternados al ver como el PSC ha renunciado a sus principios y valores, abandonando a aquellos socialistas que se sienten tan catalanes como españoles, y que desde siempre habían votado al PSOE otorgándoles durante décadas amplias mayorías. Ahora, un PSC en claro retroceso busca refugio a cualquier precio. La alcaldía bien les debe merecer la pena tenerla a toda costa dentro de unos meses cuando se produzca el relevo pactado al frente del ejecutivo local. Sin embargo, deben de estar muy recelosos y pendientes de no violentar a sus socios separatistas, ya que un eventual enojo podría apearles de manera definitiva de volver a abrazar el sillón que durante tantos años creyeron que era de su propiedad. Pero el pueblo es sabio y no olvida. Tiempo al tiempo. III