Llegó a Barcelona en 1998 y se "enamoró" de la ciudad. Jugó su primer torneo con 11 años y desde 2005 tiene el título de Maestro Internacional, pese a tener las credenciales para serlo mucho antes. Compagina su faceta de jugador, que le ha llevado a ganar grandes torneos internacionales en España, con la de profesor de ajedrecistas noveles.
¿Cómo afronta la organización de un torneo internacional como el de El Llobregat?
Estamos tratando de que cuaje todo, de organizarlo bien. A mí me gusta que salgan las cosas bien, y no es fácil, porque será la primera edición.
¿Cuál es la participación que barajan?
Más o menos, 300 jugadores. Se celebra en una ubicación, El Prat de Llobregat, a la que resulta fácil de llegar desde Barcelona y no sabemos, ya que hay una gran fuente de gente que juega al ajedrez aquí.
Ciertamente, la ubicación es buena…
Y el metro nos lleva directamente al lugar donde se celebra, al pabellón Estruch. También hay algún autobús desde plaza España… Está todo cerca.
Además, como bien ha dicho, la afición por este juego en España es importante.
Siempre hay una partida de ajedrez jugándose en España, y eso es importante. Y especialmente en Cataluña, donde hay 7.000 fichas y una cantidad de clubes que no te puedes ni imaginar.
¿7.000 jugadores federados?
Correcto.
Entonces podemos decir que la salud del ajedrez en Cataluña y España es buena, ¿no?
Sí, es muy buena. Como te dije, siempre hay una partida jugándose aquí.
Pero la difusión mediática quizá no es comparable…
En ese aspecto hay que mejorar. El ajedrez, con respecto a otro deporte, no vende. El ajedrez es para el ajedrecista. No produce un espectáculo visual como el fútbol u otros deportes. Aunque sí que tiene una vertiente más comercial, que es el ajedrez rápido, que es espectacular y a la gente le gusta más. Pero al ajedrecista realmente le gusta pensar.
Tomarse su tiempo, vaya.
Pero en El Llobregat Open Chess vamos a intentar hacer también un torneo de rápidas.
Un intento de dotar de espectacularidad al abierto.
Estamos también decidiendo el sistema de juego: jugar con dos controles de tiempo o con uno. Con dos, las partidas son mejores. Y por las mañanas hacer los torneos de rápidas. Pero también se está pensando hacer cursos de ajedrez, con monitores. Que sea todo un festival, que se puedan hacer muchas actividades para que la gente participe.
Sé que la organización pretende invitar a Grandes Maestros internacionales como Shirov, Tiviakov y Postny. ¿Podría avanzarnos la confirmación de algunos participantes?
Aún es pronto. Estuve hablando con Grandes Maestros, especialmente de aquí de Barcelona, como Muñoz Pantoja, o Fernando Peralta, campeón argentino hace poco. Y sí, están comprometidos con jugar, pero no es tan fácil, porque ellos siempre reciben invitaciones de torneos de todas partes del mundo. Hay que esperar aún. De todas formas, les comenté que este es un torneo importante porque los premios son muy buenos.
¿De qué cantidades estamos hablando?
El primer premio va estar a la altura del Open Internacional Cotxeres de Sants o el Sunway de Sitges.
Tengo entendido que habrá un torneo ‘B’ para aficionados.
No es que sean aficionados. En el ajedrez hay un tema de ranking, como en el tenis. Entonces, si se tiene cierta cantidad de puntos -Elo-, se puede participar en el grupo ‘A’. Ambos torneos son muy atractivos. En el torneo ‘B’ hay jugadores, todos federados, que no son Maestros pero que tienen un nivel bueno.
Volviendo al tema de la difusión del ajedrez, ¿qué tienen pensado para hacer más atractivo el torneo para el gran público? Hay quien ahora narra las partidas como si fuera un partido de fútbol…
El ajedrez siempre ha sido algo serio, pero ahora ha cambiado un poco. Se trata de difundir este deporte. Y sí, hay un Gran Maestro famoso, David Cuenca, que hace comentarios como si de un partido de fútbol se tratase. Se hace divertido y atrae a mucha gente. Sería interesante tener un comentarista de este tipo en el torneo que estamos organizando.
¿Se lo plantean realmente?
Hay muchas cosas para plantearse, y por supuesto que esto sería muy interesante. Habría que analizarlo. Yo soy de los tipos más serios, de la vieja escuela, pero me he dado cuenta que el ajedrez necesita un poco de difusión.
Es curioso, porque el primer campeón oficioso del mundo de ajedrez (s.XVI), Ruy López de Segura, era extremeño, y además fue en Valencia donde nació el ajedrez moderno. ¿Está suficientemente valorado el legado ajedrecístico de este país?
Dependiendo de los gobiernos que existieron no fue fácil la difusión. Cataluña tuvo un genio que si hubiera nacido en otra parte hubiera estado entre los candidatos a campeón del mundo.
¿De quién se trata?
De Arturo Pomar, de los años 60 y 70. Justamente jugaba con Bobby Fischer, que le decía que tenía mucho talento. Pero era cartero, y después de jugar tenía que ir a trabajar. Imagínate los otros Maestros, que estaban respaldados por sus gobiernos. Además, salir para él no era tan fácil. Hay gente que no ha triunfado por una cuestión del sitio donde ha nacido. Hay mucha gente que no puede desarrollar su talento.
Precisamente, usted tiene una vertiente educativa muy marcada, a través de su blog y de vídeos que cuelga en la red con consejos para aprender a jugar mejor.
Fui uno de los primeros en hacer vídeos de ajedrez. Hoy en día esto ya es muy normal, pero entonces el material informático no era tan bueno.
¿Es una buena idea introducir el ajedrez en la enseñanza primaria?
El ajedrez tiene muchas cualidades que ayudarían al alumno. Me gusta el tema de la enseñanza. De hecho, me dedico a ella durante el año y a jugar en verano. Además, en los últimos meses estamos trabajando para introducir el ajedrez en residencias de la tercera edad. Ayudaría bastante a combatir los efectos de enfermedades como el Alzheimer, porque el ajedrez te obliga a pensar y a ser creativo, a romper con la rutina. III