Santa Coloma de Cervelló

Eusebi Güell abre las puertas de su palacio para presentar la Fiesta del Modernismo

Vestimenta de principios del siglo XX con las que se realizarán las recreaciones durante la fiesta del modernismo en Santa Coloma. (Foto: Elsa Pineda/Palau Güell).
Carlos Manzano | Lunes 08 de octubre de 2018

La Asociación ‘La Colònia Modernista’ junto al Ayuntamiento de Santa Coloma han presentado este lunes 8 de octubre la 18ª Fiesta del Modernismo de la Colònia Güell en el Palau Güell de Barcelona



El Palau Güell, residencia oficial del industrial, político y mecenas de Antoni Gaudí, Eusebi Güell, ha sido el escenario sobre el que se ha presentado este lunes la 18ª edición de la Fiesta del Modernismo de la Colònia Güell, que tendrá lugar los días 19, 20 y 21 de octubre en Santa Coloma de Cervelló.

El centenario de la muerte del fundador de la colonia modernista hace resplandecer la festividad presentándola oficialmente en el Palau Güell. Josep Padró, historiador local, Gerard Segú, alcalde accidental de Santa Coloma, y Miquel Carreté, presidente de la Asociación ‘La Colònia Modernista’, han sido los encargados de dar la bienvenida al año Güell en el Baix Llobregat y, por supuesto, a la Fiesta del Modernismo.

La Fiesta del Modernismo recuerda a su 'patrón'

La 18ª Fiesta del Modernismo comenzará el 19 de octubre en la Cripta de la Colònia Güell, diseñada por Gaudí y considerada la prueba final para más tarde proyectar una de sus obras maestras: la Sagrada Familia. Miquel Carreté, presidente de la asociación modernista de la Colònia, Carme Güell, y Anna Martínez, alcaldesa de Santa Coloma, serán los encargados de inaugurar la celebración, para después continuar con un concierto del grupo Zaire Ensemble. A partir de las 20:30 horas se abrirá la Taberna Modernista, lugar de encuentro de los trabajadores durante los años que estuvo activa la fábrica.

Sin embargo, las famosas recreaciones dramatizadas de la vida en la Colònia Güell se llevarán a cabo, cada 15 minutos, el sábado 20 y el domingo 21. Además, esos días acompañarán al ambiente de principios del siglo XX diferentes talleres, juegos y actuaciones musicales. Pero, sin duda, el sábado a las dos del mediodía se servirá el plato fuerte de este año: la fiesta en homenaje a Eusebi Güell. El centenario de su fallecimiento se conmemorará con la actuación de l’Esbart Dansaire Torrellenc.

El Baix Llobregat y Barcelona, conectados por Eusebi Güell

La Colònia Güell ha vuelto a jugar este papel mágico en el que la metrópolis se une a su cinturón metropolitano a través del modernismo. Así, según ha explicado Carreté durante la presentación de la fiesta en el Palau Güell: “Este año con motivo del centenario de la muerte de Eusebi Güell contactamos con la exdirectora del Palau, tuvimos una conversación y decidimos hacer la presentación en la que fue la casa del señor Güell”. Por ello, Colònia y Palau quedan conectados con uno de los mayores industriales catalanes de los siglos XIX y XX.

De forma similar ha querido agradecer el alcalde accidental de Santa Coloma, Gerard Segú, a la Diputació de Barcelona “la acogida en esta casa que gestiona” y “a la familia Güell que nos ha dejado venir a su palacio”. Segú, convencido de la gran fiesta que se espera en Santa Coloma, ha recalcado que “la Fiesta del Modernismo nos ofrece conocer nuestra historia como municipio, pero también a mucha gente, en un proyecto que es una joya para nuestro pueblo y así debe continuar siéndolo”. Finalmente, el alcalde ha invitado a todo el mundo a “venir este fin de semana” porque según indica “seguro que les gustará y disfrutarán”, porque la Fiesta Modernista de la Colònia Güell “atrapa a todo el que asiste, tanto como a los que participamos en ella”.

Por otro lado, Padró ha ofrecido la visión más técnica e histórica del mecenas de Gaudí definiendo a Eusebi Güell como “burgués, amante de las letras, catalanista, monárquico, conservador, católico, industrial financiero y un apasionado de la obra de Gaudí, al que en la Colònia todavía se le conoce como el ‘amo’”. El historiador ha resaltado que “don Eusebi no vivió nunca en la Colònia, aunque adaptó la Masia de Can Solé de la Roca como su residencia, en vez de hacerse un palacete de ‘nuevo rico’ como hicieron otros industriales”. Esta peculiaridad de no residir en el recinto industrial se debe, en parte, a que Güell “no era un nuevo rico”, de hecho, Padró ha afirmado que “Eusebi venía a ver las inacabables obras de la iglesia y se volvía a Barcelona”. Otro argumento que refleja el tejido industrial que se estaba comenzando a formar en el Baix Llobregat en paralelo a los palacetes de los grandes señores en barrios barceloneses como el Raval, donde está la casa de don Eusebi, el Palau Güell.