Los docentes de la enseñanza pública no universitaria han ido hoy a la huelga para exigir que el Govern revierta los recortes implementados al inicio de la crisis y que perjudican tanto a las condiciones laborales de los docentes como al derecho a una educación pública y de calidad, avisan desde los sindicatos convocantes. Impulsan el parón seis sindicatos, Ustec-Stes, CCOO, la Intersindical, Aspepc-Sps, UGT y CGT, que han conseguido sacar a las calles de Barcelona a centenares de docentes, que han exigido el retorno del horario lectivo a 18 horas en Secundaria y a 23 en Primaria, la mejora de las ratios por clase, que no se cierren grupos en la pública, una reducción de dos horas para los mayores de 55 años o la consolidación del personal interino, entre otras.
Sin embargo, desde el Govern cifran el seguimiento de la huelga en un 10,7%. En el Baix Llobregat la cifra es mayor, del 14,35%, la segunda más alta del país tras la de Barcelona, que es del 16,3%. La secretaria general de Educación de la Generalitat, Núria Cuenca, ha destacado esta mañana en rueda de prensa "la poca incidencia de la huelga en el sistema público", aunque ha reconocido que el ejecutivo catalán "comparte muchas de las reivindicaciones del profesorado". Una postura que comparte el vicepresidente de la Generalitat, Pere Aragonès, que en la presentación del paquete de ayudas para los ambulatorios catalanes ha asegurado que les importa ese 10%. Por su parte, el consejero del ramo, Josep Bargalló, ve también "legítimas" las reivindicaciones de los maestros, aunque reconoce que poco pueden hacer de momento, puesto que no hay presupuesto. El Govern declinó aprobar unas cuentas hace unos meses argumentando falta de apoyos en el Parlament, y a finales de abril aprobó la segunda parte del plan de contingencia para este año.
Cuenca también ha apuntado a la falta de presupuestos para justificar los bajos datos de seguimiento de la huelga que han hecho públicos. "El profesorado ha entendido que en un momento complicado de prórroga presupuestaria como estamos actualmente, no es el mejor momento para plantear estas reivindicaciones, que entendemos", ha señalado. A su vez, la directora general ha prometido que el departamento de Educación "continuará hablando y negociando con los sindicatos para ir progresivamente implantando las medidas".