Quien fuera primer secretario del PSC de 2011 a 2014, también se ha propuesto convertir el área metropolitana de Barcelona en una sede mundial del comercio internacional, al hacer coincidir del 26 al 28 de junio nada menos que siete eventos complementarios. Además de la vigésimo primera edición del Salón Internacional de la Logística (SIL) y su spin-off E-Delivery, se celebrará el Congreso Mundial de Zonas Francas y también InTrade Summit BCN, evento que engloba el mayor congreso de agentes de carga y operadores logísticos de América Latina (ALACAT), el congreso internacional de Operadores Económicos Autorizados (OEAs), el MedaLogistics Summit y el encuentro de la Asociación de Zonas Francas de las Américas (AZFA). La entrevista se realizó días antes de las elecciones municipales.
¿Qué oportunidades va a generar la concentración de tantos eventos económicos a finales de junio?
Es la primera vez que ocurre una conjunción de acontecimientos de comercio internacional en una ciudad durante unos días. Supone una gran oportunidad, no solo para Barcelona, sino para todo el comercio mundial, la logística y las zonas francas porque son actividades diferentes pero complementarias. Construiremos agendas cruzadas con la expectativa de generar nuevos negocios y nuevas maneras de colaborar. Unas agendas que también beneficiarán a los agentes económicos y sociales del área metropolitana para crear aquí nuevas oportunidades.
¿Cómo va el proyecto de construir un barrio para “millennials” en el barrio de Marina, junto a L’Hospitalet?
Es un planteamiento teórico que tenemos que aterrizar físicamente después del verano. En cualquier caso, nos coordinamos con el Ayuntamiento de Barcelona y seguiremos haciéndolo con el que se constituya el 15 de junio. El barrio Marina son 40 islas del Eixample y es el último sector de desarrollo urbano de Barcelona después del 22@ y Sagrera. Tenemos que ver lo que queremos nosotros y los protagonistas, la gente joven, para que se quede en la ciudad y también atraiga talento con nuevas experiencias, como la industria 4.0 o la equis.0
¿Qué espera de los nuevos ayuntamientos?
Desde este espacio del delta del Llobregat lo que nos gustaría es que los ayuntamientos aprovecharan el Consorci como herramienta de desarrollo económico y social con una visión metropolitana. Esperamos que se mantenga una magnífica relación con el Ayuntamiento de Barcelona, puesto que el alcalde o alcaldesa preside el plenario del Consorcio, y que haya espíritu colaboración mutua con una institución centenaria que tanto en sus orígenes como ahora, fue y es vanguardia económica y tiene vocación de continuar siéndolo. Notamos en el conjunto de la sociedad que el Consorci es poco conocido. La gente no sabe lo que somos y lo que hacemos. Formamos parte del sector público, no recibimos ni un euro de los Presupuestos Generales del Estado, administramos patrimonio público que ya está amortizado y con los recursos que generamos favorecemos al conjunto sociedad.
Otro de sus objetivos también es consolidar el polígono de la Zona Franca como un laboratorio de tecnología 5G…
Hemos hablado con diferentes empresas para ser un polígono ejemplar en aplicación de las nuevas tecnologías. Hoy la Zona Franca no son solo calles con grandes trailers, sino también conectividad, 5G, experiencias de nuevas formas de movilidad. Y todo eso lo estamos impulsando. Otro elemento que desconoce la gente es que tenemos estación de Metro y que caminando estamos a 30 minutos de la plaza Europa y del recinto ferial de Gran Vía. Queremos impulsar que este polígono sea más ciudad. Lo queremos humanizar en el mejor sentido de la palabra. La ciudad ha de saber que tiene un espacio muy grande que también puede utilizar para diferentes acontecimientos. Me gustaría impulsar actividades culturales y deportivas en la Zona Franca. No estamos acostumbrados a venir para otra cosa que no sea trabajar. Con la industria 4.0 y la tecnología regresamos al espíritu de los talleres de artesanos de la Edad Media que estaban mezclados en las ciudades junto a las viviendas. Los polígonos aparecen con la revolución industrial que expulsó las factorías al exterior de las ciudades. Te lo digo con conocimiento de causa, porque crecí pared con pared con una fábrica textil, en el centro Terrassa. Al lado de mi habitación había telares. Ahora al lado de un piso puede haber una empresa de impresión en 3D o un centro de reparto de comercio electrónico.
¿Qué proyectan para los terrenos de ADIF que limitan con Zona Franca y L'Hospitalet y que ahora son un vertedero?
Es un depósito de chatarra. La primera prioridad de esos terrenos es infraestructura ferroviaria. Pero también queremos saber si hay algunos espacios que se puedan reconvertir en otra cosa y que trasladen algún uso. El tema está sobre la mesa, pero tanto la presidenta de ADIF como el de RENFE, con los que me he reunido, son muy reacios a perder espacios, porque es fácil perderlos y muy complicado ganarlos para poner un tren. La incubadora es el primer ejemplo de que el Consorci ejerce de catalizador entre el mundo educativo y la industria para, por ejemplo, promocionar nuevos estudios universitarios y otear las profesiones del mañana… Tenemos contactos con diferentes universidades y también con los centros educativos de formación profesional, enseñanza que impulsamos desde esta casa. Hay grandes empresas que ya tienen sus programas propios de FP dual. También promovemos la economía circular, la aplicación de los 17 objetivos de desarrollo sostenible (ODS) de Naciones Unidas, por ejemplo en un estudio que estamos haciendo con nuestros clientes a los que alquilamos naves, para mejorar la gestión de los residuos que genera el polígono industrial. También hacemos estudios para una posible agregación de la demanda en energía, pero el “bou” es tan grande que no podemos hacerlo todo de golpe.