Las formas de ocio de la infancia se están modificando y se trasladan en gran medida a la Red. Los mecanismos de juego entre los niños han cambiando sustancialmente. Así, en el caso de los padres cuando eran niños pasaban una gran parte de su tiempo de ocio en la calle; en los jóvenes actuales, dicho contexto se ha reducido considerablemente.
Los juegos tradicionales del barrio se han sustituido por el móvil o la tablet, y según las encuestas 3 de cada 4 niños consumen vídeos de YouTube, superando incluso las apps de juegos.
En este escenario encuentran series, videoclips, programas y numerosos vídeos domésticos. El aumento que está experimentando se refleja en que el 67% de las familias manifiesta que sus hijos juegan a ser youtubers, y reproducen durante el juego con sus juguetes lo que aprecian en estos vídeos.
Los éxitos cosechados por algunos youtubers determinan que los niños quieran desarrollar esas funciones. De hecho es la cuarta opción elegida por los niños, por detrás de futbolista, policía y profesor. Ahora bien, un estudio reciente concluye que solo el 14% de los youtubers españoles consigue suficientes ingresos para que esta tarea se convierta en exclusiva, a diferencia del 86% restante, que debe complementarlo con otras actividades.
En conclusión, muchos niños intentan emular a sus youtubers preferidos, abriendo sus propios canales y desarrollando sus contenidos. Ante esa tesitura, los padres deben explicar a sus hijos que YouTube constituye una herramienta entretenida e interesante, pero que entraña riesgos evidentes, que deben tener en consideración. Además, conviene reseñar que desde los catorce años los menores son responsables de los insultos o la violación de los derechos de autor de terceros en que pudieran incurrir, a pesar que de sus padres deban responder con sus propios bienes a los daños que causen.
Asimismo, el mantenimiento de un canal de YouTube supone esfuerzo, lo que puede derivar en que dediquen menos tiempo a sus labores escolares, relaciones familiares o sociales, e incluso al descanso.
Finalmente, reseñar que riesgos como la sobreexposición de los menores representa un aspecto en el que podría intervenir la Fiscalía de Menores, o la idea de que resulta fácil convertirse en un youtuber famoso, lo que podría afectar su autoestima al verificar que no resulta tan sencillo como aparenta.