Martorell

El fracaso de la FP de automoción en Martorell agota la paciencia en el Baix

Carlos Manzano | Viernes 06 de diciembre de 2019
El Govern plantea un nuevo concurso de licitación para el centro de formación, tras quedar desierto el anterior. PIMEC exige la activación del equipamiento mientras que SEAT cree que su planteamiento "no respalda al sector".

El Govern se queda solo en la licitación del infrautilizado Centro Formación Profesional de la Automoción (CFPA) de Martorell. El sector del automóvil habría contado con su segundo centro formativo en el Baix Llobregat –SEAT tiene el suyo propio en la fábrica de Martorell- y el primero público-privado, si la segunda prórroga del concurso público para licitar el CFPA no hubiera quedado desierta el 8 de noviembre. Ninguna empresa presentó una oferta real por el centro de formación, por un contrato de 25 años con un precio de licitación de 2.537.000 euros, según datos del Govern.

El problema principal radica en el concepto del centro formativo. Para empresas como Seat el planteamiento es erróneo porque no “permite respaldar al sector del automóvil y darle impulso”, según han expresado fuentes de la empresa a esta publicación. Al no ir la oferta de la Generalitat de Catalunya en esta línea, la multinacional de Martorell decidió no presentarse. Las mismas fuentes aseguran que la formación es “la palanca para capacitar” tanto a trabajadores actuales como a futuros profesionales que sean capaces de afrontar los próximos retos del sector, sin embargo, no creen que el CFPA sea la forma de hacerlo, al menos tal y como lo está haciendo la Generalitat. “Si podemos contribuir con la experiencia que Seat ha acumulado en el ámbito formativo para definir cómo debe ser este centro, estaremos encantados de prestar nuestro apoyo”, dicen desde la compañía.

PIMEC y AEBALL
Pero no solo las empresas se han topado con esta disyuntiva. Patronales como AEBALL, en declaraciones de su vicepresidenta y directora general Rosa Fiol, creen que este equipamiento debería ser un “centro de formación del sector del metal”, especialmente porque la automoción es un área dentro de dicho sector y, según Fiol, “el futuro de la fabricación está cuestionado y se está transformando hacia los servicios, lo que implica que se deberá realizar una evolución hacia la especialización metalúrgica”. La organización empresarial de la comarca considera que el centro martorellense debería formar parte de la futura estrategia territorial del Baix Llobregat y tener un gobierno público, concertado con los agentes sociales.

PIMEC, por su parte, ha lamentado que quedara desierta la licitación, aunque sigue con su demanda al Govern de establecer “con carácter de urgencia” un “plan de activación” del centro. Dicho plan debería responder, según la patronal de la pequeña y mediana empresa catalana, a unos objetivos y necesidades de “un sector clave para la política industrial de nuestro país”. La patronal augura que la transformación tiene que darse en carácter de competitividad y adaptando el CFPA a nuevos retos “integrando las necesidades de las pequeñas y medianas empresas”.

Los sindicatos piden la apertura inmediata
Josep Maria Romero, secretario general de CCOO en el Baix Llobregat, reclama que el Govern “haga frente a su responsabilidad y active el centro de formación con los recursos e instrumentos existentes”, garantizando el servicio a empresas y trabajadores del sector. Este sindicato insta a la Generalitat a que “tome decisiones estratégicas” para que el centro esté plenamente operativo en 2020, haciendo que el CFPA de Martorell esté en funcionamiento como un equipamiento integral del Sistema de Formación y Calificación Profesional de Cataluña.

Romero, además, asegura que es “clave que funcione como otros centros públicos mediante convenios y asociaciones con grandes empresas y pymes”. Este tipo de estrategia y gestión debe estar financiado, según aseguran fuentes del sindicato, con las cuotas de los trabajadores y las empresas, encajando dentro de la Ley 10/2015. En definitiva, el sindicato reclama la apertura definitiva e inmediata del Centro de Formación Profesional de la Automoción (CFPA) de Martorell como centro público, dado que no se ha podido licitar la gestión del centro a ninguna entidad u organismo privado.

El Govern busca socio industrial
La Generalitat de Catalunya aprobó el 31 de julio el trámite de concesión de gestión y explotación del CFPA de Martorell, a través del Servei Públic d’Ocupació de Catalunya (SOC). Las operadoras interesadas en el contrato de licitación de 2 millones y medio de euros tenían hasta el 30 de septiembre para presentar sus propuestas, plazo ampliado con la primera prórroga hasta el 30 de octubre y con la segunda hasta el 8 de noviembre. Ninguna empresa o entidad presentó propuesta para liderar el proyecto.

El Departament de Treball, presidido por el republicano Chakir El Homrani, considera una “mala noticia para el sector” que el concurso haya quedado desierto por ser un proyecto “tan relevante para nuestro país”. Treball ha convocado una reunión urgente con los departamentos de Presidència, Vicepresidència i Economia, Educació y Empresa i Coneixement, para lograr una salida viable al centro formativo de Martorell en los próximos meses, lo que podría desencadenar en un nuevo concurso público de licitación con la esperanza de que, en este caso, no quedara desierto.

Eurecat, ¿la solución?
La opción que se valora, según algunos medios, es que Eurecat, el Centro Tecnológico de Cataluña, tome el mando del centro. Quedando la gestión, en este caso, en manos de la administración catalana, dado que la financiación anual que recibe Eurecat es de origen público. Todas las alternativas para la gestión y explotación del CFPA siguen abiertas desde la Generalitat, a la espera del último intento del Govern: lanzar un nuevo concurso público, probablemente, antes de finalizar el año.

Planea en el ambiente, además, la voluntad del Ayuntamiento de Martorell, expresada a principios de año, de exigir la titularidad del terreno que cedió a la Generalitat para edificar este centro formativo en caso de no solucionarse su arranque al cien por cien. De momento, el alcalde Xavier Fonollosa ha pedido una reunión con el president Quim Torra para abordar lo que considera un “cúmulo de despropósitos”.