Olga Puertas Balcell | Martes 16 de junio de 2020
Sant Boi ha celebrado ya tres plenos digitales; la ciudad con sus 83 mil habitantes, debía tras la anulación del Pleno presencial de Marzo, ponerse en onda con la ley del 11/2020-31.3-Aptdo.3 que habilita los Plenos digitales a distancia, evitando la Sala de Plenos subterránea, antigua mazmorra hasta 1986, y que no cumple los requisitos PRL.
Así pues, ahora a domicilio, en este nuevo formato, que aún presenta deficiencias (hay dificultad para seguirlos al público interesado, según comentan) los concejales de la oposición, sumamos ahora un nuevo inconveniente en nuestra labor fiscalizadora y de exponer mejoras a los planteamientos de la mayoría; no se podían presentar –Mociones-, el “Viure Sant Boi” en suspenso y retrasado y como siempre Radio Sant Boi cerrada a cal y canto al mensaje alternativo, a pesar de la ventaja digital en redes que tiene probada.
No somos actores los concejales y el medio audiovisual cohíbe más que desinhibe por lo que los “bustos parlantes”, a ratos, que somos, facilita al que tiene el poder, la gestión y el negligir más la transparencia que en los plenos presenciales. Más allá de la incidencias técnicas y protocolarias, responsabilidad del secretario y el aburrido decorado de bibliotecas personales que casi todos usamos. Hay asuntos que merecen comentario:
1-Comprobar la caducidad súbita de los “Presupuestos 2020” que ya no sirven y su continua modificación en cada pleno lo demuestra; las propuestas para reformularlos se desatienden con pobreza de razones técnicas. Las partidas “Bienestar animal”, Cooperación Internacional y Deportes son susceptibles de recortes casi inapreciables por su repercusión última. También las subvenciones en general.
El ahorro podría incrementar el magro Fondo de Reserva para los Servicios Sociales.
2-Las vías alternativas para lograr fondos deben contar con el micromezenazgo privado y su coordinación en forma de Plataforma con todas las ONGs locales para evitar la dispersión de esfuerzos y recursos en campañas particulares que sobresaturan al posible donante.
3-Dado el previsible marasmo en la construcción y vivienda en propiedad: virar al alquiler y la rehabilitación.
En estos Plenos hay temas recurrentes a nivel urbanístico aún a pesar de la pandemia:” El Bori”, en esta zona hay vecinos que mantienen oposición a la edificación de dos bloques de pisos, (legales) que afearían el paisaje zonal. También en esta ocasión sus deseos han sido contrariados por la mayoría PSC-Comuns. Nadie habló empero de un edificio histórico “Can Xiol” degradado por “okupas” en lo mejor del barrio.
“Can Gavarrot” es otra zona que de manera ruidosa e insistente se reclama que se desista de hacer cambios recalificatorios para edificar, S. Boi tiene solo -un 3% de superficie urbanizable-. Sin embargo en un pleno extraordinario y acogiéndose al decreto de Alarma para informar mínimamente, se ha decidido comprarle 11000 m2 a una descendiente de Casanova, la Sra. Llosas por casi 3 M de euros pagaderos antes del 2021, casi fulminando el remanente ahorrado, para ampliar una zona verde, en plena pandemia vírica y económica y aún con las reticencias de la Interventora, que cree necesario un crédito final.
Por supuesto nadie reclama ya el cuartel de 100 mil m2 (10 campos de fútbol) ni la central Fecsa de (60 mil m2) no hay dinero, ni ganas por lo visto en nuestra diputada Guerra, (esperamos sus gestiones…).
Así con la Plenos telemáticos da gusto gobernar.