Lluis Mª Estruch

Antonio y Benito

Lluis M Estruch | Lunes 09 de noviembre de 2020

Cuando ya se reconocen los malignos efectos efectuados en la salud mental por la pandemia y se asiste a un repunte de adicciones y suicidios; es bueno evocar la figura del igualadino Antonio Pujadas Mayans (1811-1881) médico, masón y progresista, fundador del primer manicomio español en S.Boi (6-6-1854) en un antiguo convento servita desamortizado, cedido por el marqués de Sta. Cruz a perpetuidad.



Pujadas, emprendedor, pionero de los tratamientos suaves al enfermo mental, inspirado en sus viajes a Francia e Inglaterra y en especial, por sus estudios en Montpellier. El Balneario de la Puda, mutuas, parvularios, banca, prensa y la política liberal fueron campos probados. Cataluña plena de energía colectiva, creaba y creía en el progreso industrial y en el comercio; era la llamada “febre d’or” buena para todos.

Pujadas invirtió su patrimonio en el considerado por Pérez Galdós el mejor lugar para un alienado. Hoy el covid-19 se combate con prevención; la que también Pujadas como inspector higienista empleó con brotes de cólera. Pionero de la sub-contratación de servicios con el Estado, su apertura excesiva provocó el deterioro del servicio por el impago de la Administración; su ruina y su deterioro personal. Una larga transición y al final el concurso de acreedores, dieron entrada a precio bajo, al fraile milanés, Benito Menni (1841-1914) que reconstruyó la Orden Hospitalaria de S.Juan de Dios, la cual sigue a cargo de la instalación.

Menni, canonizado en 1999 murió hostigado, por sus novicios debido a la severidad de su conducta. Benito Menni mantuvo la laborterapia, la higiene y la reclusión suave para el enfermo sobre el que ahora se mantiene el criterio del ingreso breve y su alta medicada y supervisada posterior.

A pesar de sus últimos problemas de ajustes laborales y contagios, los psiquiátricos rozan el millar de empleos directos. Es el gran empleador local y su influencia es grande a través del Parc Sanitari concertado, como en los primeros tiempos de Pujadas Mayans.

También existe un “clúster” como intento de alianza con entidades similares, sin grandes resultados. La última etapa del Sanatorio opaca, sus inicios con Pujadas al que hoy S. Boi recuerda solo con una calle. Intentos de estatuas en su bicentenario, han sido abortados por el Ayto. Tal vez las dobles celebraciones sean excesivas para un Ayto. pobre que se proclama laico; o porque Pujadas polémico y atrevido, sea más difícil de celebrar que un santo, San Benito Menni.