Es más, tanto el comensal como el establecimiento deberían estar plenamente concienciados y sentir la gastronomía desde su vertiente más ecosostenible, Pues esta es exactamente la especialidad filosófica del CèNTRIC Gastro de El Prat de Llobregat: hacer reflexionar a sus comensales y concienciarlos sobre la importancia de proteger el medio ambiente. Su original modelo de negocio“slow food”, que fusiona un servicio de calidad con estrategias sostenibles y valores de economía circular, es todo un éxito entre sus parroquianos y cuenta con un gran reconocimiento profesional. El último y éxito ha sido ganar el segundo premio en el certamen Remenja’mmm 2020, que reconoce a las mejores iniciativas en la lucha contra el derroche alimentario.
El grupo GSR, la Fundació Rezero y el Banc de Recursos han galardonado con la medalla de plata de sus prestigiosos premios al CèNTRIC Gastro de El Prat porque “incorpora la sostenibilidad desde una visión integral en toda la cadena de producción, orientada a la economía circular y de ciclo corto, pasando por la planificación de las compras, la oferta gastronómica y la gestión de los residuos”.Además, el jurado del certamen ha tenido en cuenta que el restaurante desarrolla e impulsa “prácticas que van más allá del aprovechamiento de los alimentos y la reducción del despilfarro de comida, como el sistema de filtrado de agua o servir comida para llevar en envases compostables”.
El método del CèNTRIC Gastro es tan original y ecológico como sencillo. Uno de sus ases en la manga es que los productos con los que se elabora su apetitosa carta proceden casi por completo del Parc Agrari del Delta del Llobregat. El otro es que el establecimiento funciona como un perfecto engranaje de la generación de economía circular, lo que lo convierte en el modelo a seguir para todos los gastrónomos concienciados con el medio ambiente y preocupados por la salud del planeta.
Pero ser un estandarte de la restauración sostenible no es siempre tan fácil y menos en esta época de restricciones por el covid-19 que ha afectado al local pratense igual que al resto de restauradores. En el CèNTRIC han visto el aforo reducido, y el local se ha modificado para cumplir con todas las medidas de seguridad. Y hasta con eso, también han pensado en no ponerse de parte del cambio climático. “Desde siempre animamos al cliente a llevarse a casa las sobras en envases orgánicos” explica Óscar Teruelo. “Así nos aseguramos de que seguimos contribuyendo a proteger el medio ambiente incluso aunque la comida vaya a casa”.
Teruelo, fundador del restaurante junto con la chef Susana Aragón, afirma que el objetivo del CèNTRIC es “recuperar el valor del producto de la zona y darle más visibilidad” respetando siempre el medio ambiente. Así, producto de proximidad, sostenibilidad y economía circular son conceptos clave que guían el trabajo de todo el equipo. La estrategia de éxito se basa en las cuatro “P”: producto, pagesia, personas y planeta.
“No se puede consumir de todo siempre”
Los platos y recetas se elaboran siempre con productos de temporada locales (o nacionales si no hay alternativas más cercanas). La carta se modifica según las estaciones y depende de los cultivos. “No se puede consumir de todo siempre” afirma Teruelo, “los alimentos van por temporadas”. Además, el CèNTRIC tiene una relación muy estrecha con los agricultores, a quienes compra directamente. Y es que el Gastro cree más en la sostenibilidad y la cercanía del agricultor como factores decisivos, que en el producto ecológico.
Toda la plantilla se forma periódicamente en igualdad de género, los contratos son dignos y se facilita la conciliación laboral. Ya se sabe, equipo feliz, trabajo feliz. Una de las últimas preocupaciones del local es la huella de carbono, por eso las instalaciones se transforman continuamente en busca de la eficiencia energética, el agua sostenible y la reducción de la contaminación.
Y no contento con ello, el CèNTRIC no deja de apostar por la innovación. Sus proyectos actuales abarcan desde a cocina sostenible a la adquisición de una compostadora eléctrica. Además, siguen participando en la iniciativa “Cocina a Conciencia” promovida por la Fundación Raíces donde se forma en gastronomía y se ofrece trabajo temporal a MENAS.
En el horizonte del CèNTRIC Gastro pratense hay más proyectos que siguen la misma filosofía de sostenibilidad ambiental que el restaurante. “Iniciaremos, cuando se pueda, una campaña de plantación de árboles en el Delta del Llobregat” relata el dueño. Esta iniciativa, pensada para compensar las emisiones de CO2 que aún genera el restaurante, es otro reflejo del compromiso del local con el Baix Llobregat y con la conservación de su economía tradicional y sus espacios verdes. III