Ni la pandemia ni las restricciones de movilidad están impidiendo que los aficionados a las motos de montaña hayan aprovechado los últimos fines de semana para practicar cros o trial con sus motocicletas en las zonas boscosas y el medio natural de Cervelló de forma irregular. Para evitar que este tipo de prácticas dañen a la naturaleza (y sus protagonistas incumplan tanto la regulación del acceso motorizado al medio natural y las restricciones derivadas del confinamiento y la pandemia del covid-19) los Mossos d'Esquadra, los Agentes Rurales y la Policía Local han puesto en marcha un control de acceso motorizado a los montes del término municipal que no bajará la guardia “mientras sean vigentes las restricciones”, han asegurado fuentes policiales.
Los agentes llevaban varias semanas detectando la presencia de motos -tipo trial y cros- que circulaban por el medio natural de Cervelló a pesar de las restricciones. Por ese, el domingo se desplegó un operativo con seis puntos de control en accesos a la Cordillera Litoral desde el municipio. Además, está previsto intensificar la vigilancia en otras zonas rurales del Baix Llobregat muy frecuentadas por motoristas, han avanzado fuentes de Mossos d'Esquadra.
Durante el dispositivo de control, los agentes denunciaron a un total de trece motoristas: cinco por circular por veredas, cinco por carecer de la Inspección Técnica de Vehículos (ITV), uno por no disponer de seguro y el último por carencia placa de matrícula. Ley de acceso al medio natural vigente recoge que las motos y los vehículos todoterreno solo pueden circular por caminos o pistas aptos para este tipo de prácticas.