Viernes 03 de septiembre de 2021
Juan Gracia tuvo claro desde joven que quería dedicarse a dar servicio a nuestros mayores. Hoy el grupo La Torreta dispone de 4 centros en la provincia de Barcelona. En el último inaugurado en el Prat ha cumplido su sueño, diseñar el modelo de residencia que desea para el futuro.
¿Desde Residencias La Torreta, cómo se ha gestionado una situación tan adversa como la de la pandemia?
Esta ha sido una crisis sanitaria y no social. Una residencia es la continuación del hogar de nuestras personas usuarias. Se ha implicado todo el equipo poniendo a la persona en el centro de todo, paliando nuestro personal la falta de contacto con sus familiares y salidas al exterior. Hemos aplicado unos protocolos de trabajo muy exigentes para asegurar la salud y el bienestar de nuestros mayores.
¿Qué estructura dispone La Torreta para afrontar situaciones como ésta?
Nuestras instalaciones permiten realizar aislamientos por habitaciones y por plantas, funcionando por unidades de convivencia. Gracias al volumen de compras que tenemos como grupo, hemos tenido acceso a material de EPIS y PCR y hemos podido disponer de personal para cubrir bajas por COVID.
¿Qué lecciones nos deja lo vivido?
Las personas usuarias que viven en nuestros centros son muy vulnerables dada su edad y las patologías que sufren. Debe mejorar la relación entre las residencias y la red de salud pública, debe ser mejor y más integrada, como lo es cuando viven en su propio hogar.
¿Qué actividades se hacen en las residencias y centros de día La Torreta?
Nuestros profesionales realizan actividades y talleres tanto de estimulación física como cognitiva, donde la persona siempre está en el centro de todo. Se planifican atendiendo a su historia de vida, gustos y preferencias.
¿Qué le aconsejaría a una familia que busca una residencia o centro de día para su familiar más cercano?
Que valore los aspectos globales de cada centro, espacios exteriores, las instalaciones, el equipamiento, la cocina y sus dietas, el equipo de profesionales, las actividades y talleres, la web y las opiniones de otros familiares. Que tengan entrevistas con un profesional y que vengan a visitar el centro.
¿Hacia dónde van las residencias del futuro?
Deben ser como la quieren nuestros usuarios, la continuación de su hogar y donde desean pasar los últimos años de su vida, sin necesidad de medicalizar los centros. Los modelos futuros serán aquellos con infraestructuras que puedan garantizar la convivencia por unidades limitadas de usuarios dentro de una residencia que garantice unos servicios de calidad y a gusto de cada usuario. III