En 2021 se ha denunciado un 6,5% más los casos de violencia machista
Ahora que vamos dejando atrás la pandemia de la Covid-19, podemos confirmar que la violencia machista no disminuyó durante la pandemia, como podría pensarse por la reducción en el número de denuncias que se produjo, sino que simplemente, las mujeres tuvieron menor posibilidad de denunciar por el confinamiento.
Esto se demuestra con el aumento de denuncias que se ha producido durante 2021: se ha denunciado un 6,5% más los casos de violencia machista, llegando a un total de 2.080 denuncias en la comarca. 2021 también ha sido el año con más llamadas recibidas en la línea 900 900 120, con 1.118 llamadas atendidas provenientes del Baix Llobregat, y se han atendido a un total de 10.491 mujeres en los servicios de información y atención a las mujeres de la comarca, en el primer semestre de 2021.
Por tanto, desgraciadamente, la violencia machista no ha disminuido sino que siempre ha estado presente, y simplemente, durante el confinamiento, se invisibilizó. En el momento en el que volvimos a la normalidad, el incremento en las denuncias y las demandas de atención de las mujeres, se ha vuelto a visibilizar de nuevo.
Cabe destacar que el hándicap para luchar contra la violencia machista sigue siendo lo mismo: denunciar no supone una garantía de protección para las víctimas, ya que de los 2.080 casos de violencia machista que se denunciaron, sólo en 426 de ellos, se inició orden de protección. Además, las roturas de las medidas de protección son los delitos que más han aumentado respecto al año anterior.
A esto, cabe añadir que, en cuanto a la terminación del asunto judicial, el sobreseimiento provisional sigue siendo la forma de terminación más frecuente de las denuncias por violencia machista en los partidos judiciales de la comarca, situándose en un 45% de los casos, junto con la elevación al órgano competente, que supone el 32% de los casos. Este escenario configura una realidad judicial que permite en muchos casos a los agresores, ser absueltos por carencia de pruebas, o que el procedimiento judicial se alargue en el tiempo sin resolverse la situación que sufre la víctima.
“Es necesaria una protección real y efectiva, para que las víctimas vean los órganos judiciales como la solución a la violencia que sufren” afirma la presidenta del Consejo Comarcal y del Consejo de las Mujeres del Baix Llobregat, Eva Martínez Morales.
Por esta razón, desde el Consejo Comarcal y el Consejo de las Mujeres del Baix Llobregat reclamamos que los órganos judiciales cumplan con su deber de diligencia debida, porque su inacción es considerada por la ley como violencia institucional. Y una atención inmediata y de medidas y protección adecuadas, ya que las mujeres que denuncian sólo son la punta del iceberg de todas las que sufren violencia, y si queremos que todas denuncien, esto debe cambiar. No nos cansaremos de insistir, porque todas somos una: si nos tocan a una, nos tocan en todas.