Las nuevas medidas delimitan los puntos de contacto entre la ciudad y la montaña, sobrepasando los límites del parque
El Área Metropolitana de Barcelona (AMB) ha redactado y aprobado un nuevo Plan Especial de Collserola (PEPNat). Se trata de un documento que delimita una zona de borde que recorre los límites del Parque Natural llamada “espacio funcional”.
Concretamente, son sectores adyacentes al Parque que constituyen puntos de contacto entre la ciudad (asfalto) y el verde (espacio natural), y hacen de transición entre la sierra y las áreas más construidas o urbanizadas. Entre los principales objetivos de este espacio se encuentra la potenciación de la conectividad ecológica de Collserola con la finalidad de conservar la biodiversidad y aumentar al máximo los servicios ecosistémicos; reducir el riesgo de incendio y otros riesgos naturales (como las inundaciones) en el punto de contacto entre la ciudad y el espacio natural.
Por otro lado. también se pretende minimizar el impacto de las edificaciones, elementos y tejidos urbanos construidos en el Parque y potenciar su función como áreas de transición; reforzar los valores ecológicos de la periferia, ya que acaban condicionando la calidad ecológica interna del Parque; dar continuidad a la red metropolitana de espacios libres y corredores verdes; e incentivar los usos de ocio en los bordes para reducir la presión en el interior del Parque Natural.
El Plan especial delimita una zona de borde y establece directrices y recomendaciones, aunque no existe una normativa que lo regule por ley. El PEPNat realiza una serie de propuestas que no son de ejecución obligada ni tampoco tienen presupuesto asignado.
Diferentes soluciones para el nuevo espacio verde
Las propuestas del catálogo van desde una identidad corporativa y señalización específica hasta la definición de soluciones para los nuevos elementos construidos para dar cumplimiento a los objetivos del espacio funcional.
Como parte del proyecto, se tienen en cuenta los proyectos estratégicos de mejora de la conectividad; una mejora de las infraestructuras existentes; la limpieza y desmantelamiento de las estructuras; la restauración paisajística; la identidad corporativa (imagen gráfica); la definición de accesos y señalización: se marca dónde situar nuevos puntos de información, cuáles deben ser los accesos al Parque ya los caminos interiores, etc.; y los elementos construidos: se definen diversas soluciones de bioingeniería, como ecopuentes, balsas, corredores ecológicos...
Este tipo de soluciones ofrecen una identidad al parque y hacen más reconocibles sus límites, además de potenciar la renaturalización de los límites y fomentar su biodiversidad.
Un gran porcentaje de los problemas asociados a la conectividad ecológica de la sierra de Collserola se producen fuera de sus límites. El Plan especial identifica unos ámbitos específicos donde es necesario actuar para mejorar la conectividad ecológica y la permeabilidad del territorio.