El sindicato Unió de Pagesos sostiene que el controvertido proyecto que afecta al Parc Agrari carece de justificación científica y aboca al sector a la inseguridad jurídica
El sindicato Unió de Pagesos (UP) ha dado un golpe sobre la mesa del controvertido proyecto de ampliación de las Zonas de Especial Protección para las Aves (ZEPA) que afecta a la práctica totalidad del Parc Agrari del Delta del Llobregat y que podría suponer el fin de la actividad agrícola en el territorio. Según las alegaciones presentadas por UP, la propuesta de la Conselleria d’Acció Climàtica, Alimentació i Agenda Rural, la propuesta del Govern “es nula de pleno derecho, porque no incluye el análisis de afectaciones agrarias, tal y como establece la Ley de espacios agrarios”.
Unió de Pagesos denuncia que el plan de ampliación no incorpora un análisis de las afectaciones agrarias (imprescindible cuando comporta una modificación del Plan Especial de Interés Natural (PEIN), como es el caso) ni viene avalado por la pertinente justificación científica. “La ampliación de la ZEPA aboca al campesinado a una inseguridad jurídica ya que no contempla ningún plazo de aplicación ni tampoco ningún régimen transitorio” y obligará a seguir “tres normativas diferentes” incompatibles entre ellas, han advertido.
Los payeses han revelado que incluso en el redactado del texto normativo se han detectado “errores en la toponimia y en la definición de los límites”. Además, la propuesta tampoco contempla un plazo para la redacción del Plan de gestión incluido en la Red Natura 2000. Por si fuera poco, UP lamenta que “no ha habido un verdadero proceso participativo previo”, porque desde el primer momento se ha dejado fuera del debate a los afectados al revés que “en otras propuestas de ampliación de la Red Natura 2000, que ahora mismo están en marcha”, subrayan las mismas fuentes.
Ecosistema agrario
Unió de Pagesos defiende un modelo de gestión del Parc Agrari del Baix Llobregat “que tenga en cuenta que se trata de un ecosistema agrario”, algo que el Govern olvida con “la inclusión de partes aleatorias del espacio agrario en la Red Natura 2000”. El sindicato exige “una protección real y efectiva de todo el Parc Agrari que permita el desarrollo de la actividad agraria y la producción de alimentos, compatible con la mejora de la biodiversidad”, señalan.
Los agricultores se sienten ninguneados por las diferentes administraciones, que “históricamente” han hecho gala de una “mala gestión”, como se constata con “la dejadez, la falta de presupuesto y el actual cuidado ineficiente de los Espacios Naturales Protegidos del Delta del Llobregat”.