A pesar de que se han ido retirando los palos de madera de las líneas eléctricas, todavía hay algunos lugares en Gavà donde aún se encuentran estos palos, a veces en conas concretas como Can Tries, cerca del American Lake y en la calle Pi o Maragall del municipio.
Existen dos razones para deshacerse de estos palos:
- Los bordillos suelen colocarse en el centro de las aceras, lo que hace que los peatones tengan que bajar de la misma para pasar si la anchura es reducida. Esto es un problema mayor para aquellas personas con movilidad reducida o que lleven cargas, ya que hay el riesgo de un accidente si no se está atento al tráfico cuando se desciende.
- Los palos se trataron con creosota para evitar su deterioro, pero luego se descubrió que es cancerígena. La Unión Europea ha regulado estrictamente el uso de esta sustancia (incluso prohibiéndola), pero no hay obligación de retirar la creosota ya existente antes de la prohibición.
ERC-Gavà solicitará en el próximo pleno que el gobierno de Gemma Badia retire o reemplace los palos para mejorar la movilidad de los transeúntes y, lo que es igualmente importante, mejorar la salud de los ciudadanos.