La alcaldesa de Castelldefels, María Miranda, presidió la Junta Local de Seguridad celebrada el jueves 16 de febrero en el Salón de Plenos. Esta reunión contó con representantes de todos los cuerpos de seguridad que trabajan en la ciudad. Los datos comparativos obtenidos entre 2019 y 2020 muestran un descenso significativo de robos a domicilios (casi un 32%) y un aumento del número de detenidos (25%). Además, también se ha reducido el número de accidentes (7,6%) y atropellos (22,5%) en la ciudad.
En la reunión se habló sobre la seguridad en nuestra ciudad, examinando los datos de 2022 con respecto a 2019 (el último año antes de la pandemia).
Durante el año pasado, los hechos delictivos en general disminuyeron un 11,5% con respecto al 2019. Los delitos contra la propiedad bajaron un 16,7%. Entre ellos, los robos mostraron un descenso significativo: 31,9% en el interior de domicilio, 58% en el interior de vehículos, 50% a empresas y 17,1% a establecimientos. Los robos con violencia o intimidación han disminuido un 30,3%, especialmente los cometidos en establecimientos comerciales (42,9% menos) y los "tirones" (39,4% menos).
En Castelldefels, gracias a la prevención de comportamientos peligrosos, los controles de velocidad y la detección de conductores bajo los efectos del alcohol u otras drogas, se ha logrado reducir el número de accidentes en un 7,6%. Esto ha provocado que el número de heridos graves haya disminuido un 40%, mientras que el de lesionados leves ha descendido un 5,6%. Además, desde enero de 2019 hasta enero de 2023 no se han registrado víctimas mortales. Asimismo, los atropellos también han bajado un 22,5%.
Los delitos relacionados con la libertad sexual, el acoso y la violencia doméstica han aumentado. Esto se debe a que ahora hay más denuncias por comportamientos que antes no se informaban. La conciencia de haber sufrido uno de estos crímenes y el rechazo social hacia ellos también contribuyen al aumento en las denuncias.
En relación a la actividad policial para mejorar la convivencia y el civismo, las sanciones han aumentado en un 19% desde 2019 hasta 2022. Estas medidas se dirigen principalmente a aquellos comportamientos que producen molestias tanto por parte de personas como establecimientos. Entre los temas más destacados se encuentran los relacionados con la limpieza y los vertidos (22,6%), las molestias vecinales (12,8%) y los animales de compañía (9,5%).