El Hospital Universitario de Bellvitge (HUB) está financiando un proyecto con fondos europeos para obtener biomarcadores de imagen. Esto permitirá avanzar en 44 subproyectos dirigidos por 20 investigadores, lo que ayudará a responder preguntas clínicas sobre cáncer y patología no tumoral sin respuesta. El radiómica es una nueva forma de diagnóstico por la imagen, que se basa en el análisis cuantificable de datos invisibles al ojo humano. Gracias a la inteligencia artificial y los algoritmos, estos biomarcadores de imagen pueden predecir la evolución futura de la enfermedad.
Los biomarcadores de imagen podrían permitirnos predecir cómo evolucionará un tumor a partir de características imperceptibles para el ojo humano. Estos marcadores se basan en pruebas de diagnóstico por la imagen como resonancia magnética o TAC, y pueden resultar relevantes para el diagnóstico preciso del cáncer o para determinar su futuro desarrollo.
El HUB ha comenzado un proyecto de radiómica con 44 subproyectos dirigidos por 20 investigadores. Esta iniciativa se centra en el uso de un enfoque cuantitativo para el diagnóstico, que permitirá detectar y aplicar biomarcadores de imagen junto con otras tecnologías como la inteligencia artificial y el aprendizaje profundo (deep learning) en la práctica clínica.
Gracias a los fondos europeos FEDER, el HUB ahora tendrá herramientas tecnológicas (Olea Sphere SDK y Automation Platform de Canon Medical) para que los profesionales del servicio de Diagnóstico por la Imagen puedan empezar a crear software y algoritmos.
El Dr. Calvo, director del Servicio de Diagnóstico por la Imagen del Hospital Universitario de Bellvitge, explicó que este proyecto se centró en preguntas clínicas generadas por los equipos de radiología, medicina nuclear y médicos especialistas en patologías específicas como tumores, fibrosis pulmonar, esclerosis múltiple, artritis reumatoide y trasplante renal. Consideran que los biomarcadores de imagen pueden aportar respuestas importantes a estos problemas. Según el Dr. Josep María Haro, director del Instituto de Investigación Sanitaria de Bellvitge (IDIBELL), “los biomarcadores son una herramienta clave para la medicina personalizada”.
Mediante el análisis bioinformático con los datos acumulados a lo largo de los años de pacientes atendidos, se podrán para desarrollar biomarcadores bajo una regulación estricta, que tendrá en cuenta factores clínicos, histológicos y respuesta al tratamiento. Estos biomarcadores se combinan con datos clínicos para determinar la presencia de enfermedades como el cáncer. Esta información se utiliza para hacer un diagnóstico temprano, evaluar la gravedad de la condición y desarrollar tratamientos más eficaces. Además, los profesionales de otros centros y hospitales pueden aprovechar este conocimiento para mejorar el cuidado de sus pacientes.
Este proyecto es un avance en el sistema de salud catalán. Según el Dr. Calvo, se trata de algo único porque incorpora una metodología estructurada para obtener biomarcadores y desarrollar software. Esto coloca a Cataluña como líder en la generación de conocimiento e innovación en biomarcadores de imagen.