Salvo cataclismo, Antoni Balmón (PSC) volverá a ser alcalde de Cornellà de Llobregat cuatro años más. Y lo hará de forma holgada y sin ningún tipo de oposición como siempre desde que ocupó la alcaldía en abril de 2004 en sustitución del ex-President de la Generalitat, Josep Montilla. Balmón (Barcelona, 1960) ha ganado por K.O en las elecciones municipales de 2007, 2011, 2015 y 2019 –siempre con mayoría absoluta- y todo apunta a que volverá a arrasar el próximo 28M.
El 29 de mayo a pena habrá nada nuevo bajo el sol de Cornellà. La ciudad más poblada del Baix Llobregat se despertará con el mismo alcalde electo con el que se fue a dormir la jornada de reflexión previa a los comicios municipales: el también vicepresidente ejecutivo del Área Metropolitana de Barcelona (AMB), Antoni Balmón. Y su victoria será tan arrolladora como siempre pues mantendrá los actuales 14 concejales (46,10% de los votos), uno más de los que necesita para gobernar con mayoría absoluta un consistorio compuesto por 25 ediles.
Balmón es uno de los ejemplos en activo más claros de que el antiguo ‘cinturón rojo’ es un feudo inexpugnable de los socialistas, suceda lo que suceda. No tienen oposición. Solo Ciutadans (CS) les metió algo de miedo en el cuerpo en 2015 pero perdió comba en 2019 y desde entonces no ha hecho más que retroceder. De hecho, los vaticinios apuntan a que la formación naranja perderá sus actuales 3 ediles y apenas atraerá a un 4,10% de los votantes, una cifra insuficiente para conseguir representación y que supone menos de la mitad de las papeletas conseguidas en 2019.
La debacle de los compañeros de Inés Arrimadas será aprovechada por dos de sus tres competidores en el reducto de la centro-derecha (PP y Vox) para entrar en el consistorio, con suerte dispar. Los populares aspiran a conseguir dos ediles (con el 7,40% de los votos) y los de Santiago Abascal pueden debutar en el consistorio ‘cornellanenc’ con un edil, gracias al apoyo del 6,30% de los sufragios. El tercero en discordia, Valents, no tendrá representación.
Tras ERC, el segundo varapalo del 28M –pero más light- será para ERC que vivirá una noche electoral agridulce pues, aunque repetirá como segunda fuerza y mantendrá sus actuales cuatro concejales, no crecerá en la ciudad, tal y como aspira. Al contrario, más bien perderá fuelle, pues pasará de recolectar el 14,6% de las papeletas a solo el 12,80%. Y eso, a pesar su alianza electoral con EUiA, concebida para arrebatar votos al resto de formaciones de izquierdas.
De poco parece que le va a servir a la alcaldable republicana, Raquel Albiol, que cierren simbólicamente esta candidatura electoral conjunta dos viejas glorias locales: Joan Tardà (primer concejal de ERC desde la restauración de la democracia en 1976 y mediático ex portavoz de la formación en el Congreso de los Diputados) y Frederic Prieto, primer alcalde electo de la ciudad tras el franquismo, por el PSUC.
Tampoco van a sacar partido de concurrir a las municipales por separado los dos partidos autóctonos situados a la izquierda del PSC (en la órbita del espectro ideológico de Unidas-Podemos): En Comú Movem Cornellà y Podemos Cornellá. Las dos formaciones locales van a mejorar ligeramente sus resultados (arañándole votos a ERC) pero prácticamente van a repetir los resultados de 2019 lo que le vuelve a otorgar dos concejales a cada una. Podemos ganará el duelo particular, atrayendo al 8,3% de los votantes de Cornellà (mejorando el 7,72% de 2019), mientras que En Comú Movem aglutinará al 7,27 (un ligero descenso respecto al 7,50%% conseguido hace cuatro años.
PARTIDO | CONCEJALES |
---|---|
PSC | 14 |
ERC | 4 |
PODEMOS | 2 |
EN COMÚ MOVEM | 2 |
PP | 2 |
VOX | 1 |
El trabajo de campo que ha servido de base para el presente análisis, se realizó entre los días 3 al 10 de marzo. El estudio se ha elaborado partiendo de una participación estimada del 63%, superior a la de 2019 en 5,52%.
Informe elaborado para EL LLOBREGAT, por Taforasía SL (B66139213)