Viladecans está celebrando, a lo largo de 2023, el aniversario número 20 de su famoso complejo cultural y deportivo, Atrium Viladecans. El domingo 26 de marzo, se llevará a cabo un gran evento en este lugar desde las 10:30 hasta las 21:00 horas para celebrar este hito. Los visitantes podrán disfrutar de una exposición sobre los 20 años del complejo, sesiones de body pump y DJ, actividades familiares, una zona gastronómica, un concierto con Los Niños Jesús y Jordi Évole, y culminará con un espectáculo de fuegos artificiales.
La fiesta tiene como objetivo conmemorar dos décadas de un modelo excepcional de convivencia cultural y deportiva que ha sido muy bien recibido por la sociedad de la ciudad. Atrium Viladecans comenzó en el año 2003, cuando el Ayuntamiento inauguró una instalación innovadora que combinaba actividades culturales y deportivas, especialmente en el ámbito teatral, convirtiéndose en un recurso valioso para la región y Cataluña.
Durante las celebraciones, se llevará a cabo una sesión de body pump en la calle a las 10:30, para la cual los interesados deberán inscribirse en persona en el lugar. Por la tarde, a partir de las 17:00, habrá actividades familiares, un área dedicada a la gastronomía y una sesión musical con la DJ Marian. El evento principal tendrá lugar a las 19:30 con la actuación de Los Niños Jesús, liderados por Jordi Évole y su grupo de versiones.
El periodista comenzó su carrera en televisión en Viladecans en 1998 como redactor de Viladecans Televisión. Presentó la ceremonia de inauguración de Atrium y veinte años después regresa a la ciudad, que según el alcalde Carles Ruiz, lo recuerda con orgullo.
La jornada finalizará con un piromusical. Sin embargo, aquellos que deseen asistir a la fiesta pueden inscribirse en atriumviladecans@atriumviladecans.com y ser invitados a merendar por la organización. Para obtener más información sobre la celebración, visite www.atriumviladecans.com.
Atrium Viladecans fue concebido como un innovador concepto en la oferta de servicios a la ciudadanía, al combinar deporte y cultura en una misma instalación. Esto creó un espacio único con características y personalidad propias. Su apertura en 2003 marcó un momento clave en la transformación que Viladecans ha experimentado en las últimas décadas. La ciudad se ha orientado hacia el bienestar de sus ciudadanos y Atrium es uno de los ejemplos más destacados de este cambio hacia una ciudad moderna.
El edificio, diseñado por el equipo de arquitectos liderado por Josep Maria Gil i Esteve Bonell, es una estructura diáfana con líneas rectas y fácil circulación para los usuarios. Ocupa 31.000 m², de los cuales 14.000 m² están construidos. Es una instalación que recibe alrededor de 1.000 personas diariamente. El equipo también ha sido responsable de otros proyectos notables como el Velódromo de Horta o las últimas reformas en el Hospital de Sant Pau.
La instalación cuenta con diferentes áreas para servicios deportivos y artes escénicas, cada una con un diseño adecuado a su oferta y manteniendo la filosofía de modernidad y comodidad. Destaca en el área de artes escénicas la exposición permanente de murales creados por el artista Joan Pere Viladecans para el vestíbulo del Auditorio.
El edificio cuenta con dos áreas principales: una enfocada en deportes y otra en artes escénicas. En la zona deportiva, hay dos piscinas, un polideportivo, salas de actividad física, zona termal y solárium. Esta área está disponible para personas que se han abonado a las actividades físicas, cursos diversos, colectivos educativos, colectivos en riesgo de exclusión social y entidades deportivas de la ciudad.
La zona de artes escénicas del lugar tiene dos áreas: el Auditorio y la Sala Pequeña. El Auditorio tiene una capacidad para 828 butacas y un espacio escenotécnico con medidas de 25 m de altura, 23 m de anchura y 18 m de fondo, siendo comparable a teatros o auditorios conocidos como el Gran Teatro del Liceo, el Teatro Nacional de Cataluña o el Auditorio Kursaal de San Sebastián. En este espacio se pueden programar diferentes tipos de montajes, desde pequeños hasta grandes formatos, y géneros que van desde teatro a danza, incluyendo espectáculos musicales como ópera, ya que cuenta con foso para orquesta.
La Sala Pequeña tiene múltiples capacidades debido a su versatilidad, lo que permite colocar el escenario en cualquier parte de la sala y programar obras con formatos singulares. La programación de la sala es variada e incluye espectáculos de teatro alternativo, infantil, monólogos, danza contemporánea y circo.
Desde que se estableció la programación en Atrium Viladecans, se han llevado a cabo casi 1.800 representaciones de 1.510 espectáculos con una asistencia de casi medio millón de personas. Además, durante todo el año, los espacios están abiertos para colectivos educativos y se ofrece una programación específica para estudiantes desde infantil hasta bachillerato. Se garantiza que todos los estudiantes de la ciudad tengan acceso a la experiencia artística tanto desde el patio de butacas como desde el escenario en alguna de las actividades realizadas en colaboración con los centros educativos.