El vandalismo se paga, incluso durante una huelga. Los Mossos d'Esquadra han informado este miércoles de la detención de cuatro hombres y la imputación de una mujer a los que se considera responsables de los daños causados en los autobuses de la compañía Monbus-Julià durante las últimas jornadas de huelga. Los cinco son conductores de la compañía y se les imputan los delitos de daños, contra la seguridad del tráfico y de coacciones en relación a los ataques sufridos por autobuses durante las protestas de la plantilla de las líneas del Baix Llobregat.
Los autores de los actos vandálicos actuaban de dos formas complementarias. O bien seguían a los autobuses (que transportaban pasajeros en el momento de los ataques) con un turismo y arrojaban objetos metálicos en marcha contra las ventanas, o bien rompían cristales con un martillo, aprovechando las detenciones del vehículo en la vía pública. La empresa habría sido víctima más de 200 ataques desde el inicio de la huelga, con unos daños acumulados valorados en más de 600.000 euros. Los propios Mossos han difundido en las redes sociales un video donde aparecen grabados dos de los ataques.
Las detenciones de los cinco sospechosos se han realizado durante estas últimas dos semanas, aunque la investigación sigue abierta. Los sindicatos convocantes de las diferentes jornadas de protesta han dejado claro su "rechazo a cualquier forma de violencia".
Se da la circunstancia de que los sindicatos han desconvocada este mismo miércoles la huelga prevista para este jueves 20 de abril tras llegar a un acuerdo con la empresa Avanza. La nueva propuesta económica de la compañía que prevé un incremento salarial de entre el 3% y el 3,5%".