Viena Edicions acaba de publicar un curioso libro de ilustraciones con pinceladas de texto s complementarios que plantea un emotivo recorrido por el día a día de Sant Just Desvern y sus lugares más emblemáticos. La publicación, denominada 'Dibuixant Sant Just', es una obra coral entre Xita Camps (dibujos) y Palmira Badell (textos) y puede definirse como "una expresión de color y de alegría que dibuja una sonrisa en la cara a medida que se van pasando páginas", y que recrea la urbe "de antes, de ahora y del futuro como nunca se había hecho" según el alcalde de la ciudad, Joan Basagañas.
Los paisajes, lugares eventos e incluso 'botigues' que resiguen Camps y Badell en su paseo artístico y literario por la ciudad son fácilmente identificables y muestran un Sant Just "con carácter", subraya Basagañas, "Son dibujos creados desde la desde la cotidianidad, desde la vida real de los vecinos", añade el alcalde que también firma la introducción del libro.
La andadura gráfica de 'Dibuixant Sant Just' se inicia en una parada de autobús, junto al mural de Guinovart ("a la espera de que algún día llegue el metro", como se explica en las primeras viñetas) y acaba en el TRAM. Desde ahí, el libro traza una ruta que conduce a la casa modernista Can Ferris y a Can Cardona (original del siglo XIV), a la casa consistorial, a la plaza dels Estudis Vells (donde se encuentra una de las primeras escuelas del municipio), al singular Walden-7, a la espectacular casa de cultura de Can Ginestar o al refugio antiaéreo que recrea cinco historias de cinco artistas de Les Escoles, entre otros muchos destinos
El libreto funciona también como una guía por los equipamientos y servicios de la ciudad, como la emisora municipal Ràdio Desvern, la biblioteca Joan Margarit, la iglesia (que tiene cuatro campanas llamadas Justa, Pastora, Raimunda y Josepa), el Centre Civic Salvador Espriu (ubicado en el reconvertido edificio de la Prebetong), el CAP, el Casal de Joves, el Sanatori, el polideportivo La Bonaigua o las escuela públicas Canigó, Montserrat y Montserrat. Pero el paseo no se circunscribe a las calles, también propone paseos por la Vall (Can Gelabert y Can Roldan), la Penya del Moro (desde cuya antigua torre de vigilancia se divisa el Baix Llobregat), la fuente de Can Marlès (también llamada de la Xima), la Riera o el Bosquet.
También hay un sus páginas un viaje y un espacio reservado al comercio de proximidad, con el Mercat para abrir boca (con rotulos de cada uno de sus puestos, bar incluido).Aunque Xita Camps y Palmira Badell tampoco se olvidan de los establecimientos de siempre como el Celler Can Mata, Cal Sabater, Cal Llibreter o la Creu de Terme i L'Hostal Vell, la casa más antigua del municipio todavía habitada. En esencia, un libro para "gaudir", como invita Basagañas. III