Baix Llobregat

Europa y la Copa América impulsan el turismo sostenible en la costa del Baix

El turismo sostenible permite disfrutar del sol y playa y reflexionar sobre los efectos del cambio climático en el paisaje (FOTO: AMB)
José Barbero | Viernes 07 de julio de 2023
El plan comarcal, enfocado al modelo tradicional del ‘sol y playa’, ha recibido 2 millones de euros de los fondos europeos Next Generation. La competición de vela, que se celebrará en 2024 en la costa de Barcelona, servirá como reclamo para atraer visitantes al territorio.

Uno de los puntos fuertes que convierten al Baix Llobregat en un destino turístico atractivo para muchos visitantes son los espacios naturales del Delta del Llobregat. Estas humedales son un gran reclamo para toda la comarca. Las cifras lo demuestran. Según datos de 2022, el 39% de las empresas que operan en el entorno deltaico desarrollan su actividad en este sector. Además, durante el verano pasado, alrededor de 313.000 turistas visitaron el Baix Llobregat, de los que algo más de la mitad eran extranjeros, y la ocupación hostelera alcanzó un 77,5%, cerca de un 25% más que el año anterior. Esto demuestra que el turismo se ha convertido en uno de los grandes motores económicos del territorio y cada vez cotiza más al alza.

Es por eso por lo que, teniendo en cuenta la riqueza medioambiental que caracteriza a la comarca, ya sea por sus parques naturales o por la zona agrícola, se hace cada vez más necesario fomentar un turismo sostenible, que, además de permitir a los visitantes disfrutar del sol y las playas de la zona del Llobregat, les ayude a reflexionar sobre los efectos del cambio climático en estos paisajes naturales.

Por este motivo, y aprovechando que en 2024 se celebrará en Barcelona un evento deportivo de gran envergadura como es la Copa América de Vela, desde las instituciones del Baix quieren atrapar esta ola para diseñar y promocionar un producto turístico que atraiga a más visitantes al Delta, pero basándose en criterios de sostenibilidad medioambiental. Este producto, junto con una serie de acciones conjuntas, se ha materializado en el Plan de Sostenibilidad Turística Costa Barcelona-Delta del Llobregat, que ha obtenido una ayuda de dos millones de euros procedentes de Europa.

El montante del que está dotado este plan procede de la tercera convocatoria del Programa Extraordinario de Planes de Sostenibilidad Turística en los Destinos, llevada a cabo por el Ministerio de Industria, Comercio y Turismo, que ha otorgado a Cataluña un total de 53,7 millones de euros de los fondos Next Generation de la Unión Europea. De estos, 50,5 millones están enfocados a destinos de sol y playa y a zonas de turismo rural del litoral catalán.

En este Plan de Sostenibilidad Turística del Delta participan el Consorci de Turisme del Baix Llobregat, la Diputación de Barcelona, el Área Metropolitana de Barcelona (AMB) y los ayuntamientos de Castelldefels, Gavà, Viladecans, Sant Boi y El Prat. Estos consistorios se han comprometido a garantizar el futuro del desarrollo sostenible de la zona.

Con los dos millones obtenidos, los entes gestores del plan pretenden llevar a cabo ocho acciones innovadoras para fomentar el turismo sostenible de sol y playa. Entre estas acciones encontramos la restauración y renaturalización de los paisajes de dunas del territorio. “Dentro de la restauración de la zona, también buscamos hacer acciones para sensibilizar a los visitantes sobre los efectos del cambio climático en las playas del Delta y cómo podemos combatirlo”, explica Gemma Rodríguez, consejera de Turismo del Consell Comarcal del Baix Llobregat.

Otro de los puntos fuertes del plan es la puesta en valor de los servicios ecosistémicos, es decir, aquellos que ayudan a obtener beneficios de la naturaleza y los ecosistemas, destinados a mejorar la experiencia de las visitas turísticas y ayudar a los visitantes a tomar consciencia de que están en un parque natural y de los riesgos que supone el cambio climático. Entre los diversos proyectos que se encuadran en este plan destaca la instalación de un nuevo mirador a lo largo del itinerario del río Llobregat, aunque aún no está previsto el punto exacto en el que se construirá.

Otro de los pilares básicos del Plan de Sostenibilidad Turística del Delta del Llobregat es la adecuación de los itinerarios turísticos no motorizados que unen las playas de Castelldefels, Gavá, El Prat y Viladecans con sus respectivos núcleos urbanos. “De esta forma, queremos descongestionar las playas y hacer que los visitantes se adentren en el interior de cada municipio para poder disfrutar de los atractivos turísticos que proponen estas ciudades”, aclara Rodríguez. Este es el caso de Viladecans, que ya trabaja en la mejora del itinerario del Camí del Mar, que conecta la zona urbana de la ciudad con el parque y la playa.

Entre estas propuestas encontramos la mejora del alumbrado público de este camino para vehículos a motor, usuarios del carril bici y peatones. Se instalarán luces led que se activarán mediante sensores de presencia, de forma que no siempre estarán encendidas, solo cuando algún peatón pase cerca, con lo que se reducirá la contaminación lumínica. También se plantarán árboles a lo largo de todo el camino para crear espacios de sombra constante y hacer más agradable el paseo.

Segundo intento

El Plan de Sostenibilidad Turística del Delta aprobado en mayo de 2023 surge como un segundo intento de las entidades de la comarca por presentarse a la convocatoria del Programa Extraordinario de Planes de Sostenibilidad Turística en los Destinos, que ya cuenta con tres ediciones, desde que se puso en marcha en 2021.

En mayo de 2022, el Consell Comarcal, junto con los ayuntamientos de Castelldefels, Gavà, Viladecans, Sant Boi y El Prat (esta vez sin la Diputación de Barcelona ni el AMB) presentaron una propuesta de turismo sostenible con el fin de “mejorar el capital natural del sistema turístico y su adaptación al cambio climático”, según explicaron en su momento sus promotores. Pero era un proyecto muy grande y no acabó de cuajar en el marco de las ayudas Next Generation.
“Se trataba de un proyecto mucho más ambicioso. El actual es solo una parte de aquello que trabajamos en 2022, con un presupuesto más reducido, y con la colaboración ahora de la Diputación y el AMB”, señala Gemma Rodríguez. El plan 2023 “es solo la punta de lanza para conseguir, en un futuro, sacar adelante el proyecto original”, avanza la consejera comarcal.

Barcelona ha sido elegida ciudad anfitriona para celebrar la edición número 37 de la Copa América de Vela. La competición, que ha sido declarada Acontecimiento de Excepcional Interés Público en el Boletín Oficial del Estado (BOE), será un evento que dará mucha visibilidad – más aún- a todo el litoral barcelonés, en el que se incluyen las playas de los municipios del Delta.

Además, esta competición tendrá una duración bastante extensa, ya que se inaugurará el 22 de agosto de 2024, pero se alargará hasta el 27 de octubre, lo que aumentará el número de turistas susceptibles de ser visitantes potenciales del litoral barcelonés, una gran oportunidad para dar relevancia a las playas del Baix. “Queremos aprovechar este momento para diseñar y promocionar un producto turístico atractivo y sostenible, dedicado a la Copa América”, explica Rodríguez.

Desde el Consorcio de Turismo, aseguran que la finalización de los trabajos necesarios para poder llevar a cabo las acciones recogidas en el Plan de Sostenibilidad Turística está fechada en el 30 de junio de 2026 (dentro de tres años). Esto, lejos de ser un punto final, debería ser el inicio de un compromiso de las instituciones del Baix Llobregat en pro de la potenciación del turismo como motor de la comarca, pero siempre desde un punto de vista mucho más responsable y sostenible, y así dar visibilidad a uno de los puntos fuertes de la zona: los espacios naturales del Delta del Llobregat. III

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