La depuradora de Abrera y la macro-depuradora del Llobregat (en El Prat) no solo se van a dedicar a hacer potable buena parte del agua que consume el área metropolitana de Barcelona. La Agència catalana de l’Aigua (ACA), dependiente de la Generalitat de Catalunya, acaba de anunciar un plan de inversiones –propias y procedentes de los fondos Next Generation de la Unión Europea (UE)- que permitirá que las dos instalaciones comarcales sumen a su actividad habitual la producción de biogás.
La función de las plantas de biogás de ambas depuradoras será “contribuir al autoconsumo de las instalaciones, con el objetivo de que, en el plazo de 10 años, el 78% de las necesidades energéticas se cubran con energía verde”, han subrayado fuentes de la ACA. La agencia ha presupuestado destinará a este capítulo un total de 5,8 millones de euros en toda la red de depuradoras catalanas.
En el caso de la depuradora de Abrera, la ACA aportará directamente en una primera fase 154.380 euros (aunque el montante total de las actuaciones previstas asciende a 227.000 euros). La intervención consistirá, por un lado, en la implementación de “plataformas de recogida y rehidratación de barros para su estabilización” y, por el otro, en “la generación del biogás y su valorización energética”, han explicado desde la ACA.
La planta de biogás de la macro-depuradora de El Llobregat se sufragará mediante una inyección de 457.000 euros aportados por el Instituto para la Diversificación y el Ahorro de Energía (IDAE) que gestiona los fondos Next Generation. La actuación en la planta de El Prat permitirá “la producción de biogás mediante la rehidratación y digestión anaerobia de los barros (recogidos en la depuradora) para su aprovechamiento energético”, han indicado las mismas fuentes.
Desde 2018, la ACA está desplegando un plan de eficiencia energética a las depuradoras de toda Cataluña, que prevé una inversión de 159 millones de euros en un plazo máximo de 10 años, para conseguir que el 78% de la energía para garantizar el funcionamiento de estas plantas provenga de energías renovables y propias. Este plan se articula en tres ejes: la energía fotovoltaica, la producción de biogás y las mejoras en la eficiencia energética de las depuradoras.
En relación con el primer eje, actualmente se están construyendo parques fotovoltaicos en 29 depuradoras de toda Cataluña, en una apuesta decidida y decisiva por “la descarbonización del ciclo del agua, la reducción de las emisiones de CO₂ y el fomento la autosuficiencia energética de las depuradoras”, han señalado desde la Generalitat. Actualmente, la energía generada en las depuradoras de Cataluña a partir del biogás es de 44 GWh/a, lo que representa un 14% del consumo de renovables, lo que comporta un ahorro anual en la compra de electricidad de 4,3 millones de euros.
El objetivo es duplicar la producción de biogás en 2027, pasando de los 43.600 MWh/año a los 110.348 MWh/año. O lo que es lo mismo, pasando del 14% del consumo energético en renovables al 40%. En paralelo, se va a seguir trabajando en la mejora sistemática y continúa de la eficiencia energética de las depuradoras, pues se ha constatado que todavía se puede reducir más el consumo, en concreto, entre un 10% y un 11% adicional.