Una macro-operación conjunta de la Policía Nacional, los Mossos d’Esquadra. La Guardia Civil, la Guardia Urbana de Barcelona y diferentes funcionarios especializados han desmantelado este miércoles una red de comercio ilegal de animales de compañía que operaba en Cataluña y en Madrid. Entre los once establecimientos registrados por los agentes hay que destacar uno ubicado en Esplugues de Llobregat.
En el operativo, dirigido por el juzgado de instrucción número 23 de Barcelona y la Fiscalía de Medio Ambiente y que ha comenzado a las 6 de la mañana, han participado un centenar de agentes y ha concluido con la detención de 18 personas implicadas en la trama. Los investigadores creen que tras los arrestos se ha podido desmantelar completamente el entramado delictivo que operaba desde hace aproximadamente ocho meses.
A los detenidos se les acusa de los delitos de maltrato animal, estafa, falsedad documental, intrusismo profesional y blanqueo de capitales. La causa penal está bajo secreto de sumario. La policía llevaba varios meses tras la pista de red ilegal y no ha intervenido hasta tener perfectamente planificado el golpe definitivo al entramado de venta ilegal de animales de compañía.