Los Mossos d'Esquadra han asestado un duro golpe a los conductores que ejercen como taxistas ‘pirata’ en el Aeropuerto Josep Tarradellas de Barcelona-El Prat. Según han informado fuentes del cuerpo policial, la semana pasada fueron denunciadas cinco personas que ejercían ilegalmente la profesión “sin ningún tipo de autorización administrativa” operando en las terminales pratenses. Los cinco vehículos interceptados fueron inmovilizados y trasladados al depósito municipal por la Policía Local de El Prat.
El operativo en el que se han detectado los cinco taxis piratas forma parte de los controles específicos que periódicamente realiza en los accesos al aeropuerto la División de Tráfico de la policía autonómica catalana con el fin de detectar vehículos “que puedan estar llevando pasajeros, haciendo funciones de taxi, sin la autorización específica legal”, han precisado las mismas fuentes.
Los taxistas piratas como los detectados la semana pasada acostumbran a utilizar coches particulares (sin ningún distintivo que los identifique como vehículo de transporte público ni con la preceptiva matrícula en color azul). Los infractores no siempre utilizan sus propios turismos o furgonetas aptas para el transporte de pasajeros, sino que los alquilan para dificultar su rastreo y ser identificados ya que “muchos de ellos reinciden a pesar de las cuantiosas multas que se les imponen, cuyo importe económico puede alcanzar los 4.000 euros”, han subrayado un portavoz de los mossos.
Este tipo de chóferes sin licencia de autotaxi suelen captar preferentemente a sus clientes en las terminales de llegada aeroportuarias (tanto en la T-1 como en la T-2), pero también operan “en puntos turísticos y hoteles” de toda Cataluña, según los Mossos d’Esquadra.