Tras casi un año de investigación policial, los Mossos d’Esquadra han localizado y desmantelado una organización criminal, con actividad en El Prat de Llobregat, que se dedicaba a la producción y tráfico de drogas, fabricaba armas de fuego caseras y defraudaba energía a las compañías eléctricas. A finales de febrero de este año, un dispositivo policial ha registrado varios domicilios vinculados a la organización, y ha detenido a doce personas, con edades que oscilan entre los 20 y los 52 años.
En total, los agentes han intervenido 860 plantas de marihuana, 7.802 gramos de cogollos de marihuana, 9.150 gramos de cocaína y 18.460 euros en efectivo. El valor total de la droga en el mercado ilícito supera los 500.000 euros.
En esta operación, la Policía Local del Prat ha colaborado con el Equipo Conjunto de Investigación de los Mossos d'Esquadra, conformado por la División de Investigación Criminal de la Región Policial Metropolitana Sur y la Unidad de Investigación del Prat de Llobregat.
Todo se remonta al 2 de marzo de 2023. Un cuerpo policial entra y cachea, bajo mandamiento judicial, un domicilio en el Prat de Llobregat, tras una serie de indicios que apuntaban a la existencia de una plantación de marihuana. Tras realizar el registro, los agentes descubren 103 plantas de marihuana y todos los enseres necesarios para una plantación de interior (extractores, aire acondicionado, filtros, luces y temporizadores). Además, incautan 170 gramos de marihuana lista para su consumo, una báscula, un arma de fuego corta y un teléfono móvil.
En este domicilio residían un hombre y una mujer, junto con sus cuatro hijos menores de edad. En la investigación, los agentes constataron que el hombre formaba parte de una estructura criminal operativa en El Prat dedicada al tráfico de drogas. Además, se detectaron otros delitos como la tenencia de armas y la defraudación de fluido eléctrico.
A raíz de la localización de este primer miembro, la investigación continúa. Los investigadores identificaron a otros ocho integrantes activos de la organización, así como varios colaboradores. Los agentes lograron localizar otros domicilios en los que se cultivaba marihuana durante los meses de la investigación.
Finalmente, el 29 de febrero de 2024, los agentes inician el dispositivo de explotación, con un total de diez registros simultáneos en varios domicilios vinculados con la organización, en los municipios de El Prat de Llobregat, San Adrià del Besòs y Tarragona.
Durante el registro, han detenido a doce personas. Además de toda la droga incautada, los investigadores han descubierto un taller artesanal de armas de fuego donde se han incautado dos armas de fuego caseras, además de otras piezas de armas y munición. Por si fuera poco, los investigados habrían logrado tomar el control de las buhardillas de un edificio y del sótano de otro: habrían accedido a estos espacios al forzar el techo y la pared, con el objetivo de instalar plantaciones indoor de marihuana.
Además, los agentes han detectado conexiones fraudulentas a la red eléctrica en ocho de las inspecciones a los domicilios y locales de la banda. Según los cálculos, los criminales habrían defraudado la energía equivalente a una población de 162 viviendas, y el fraude ascendería a un total de 198.430 euros.