El Hospital Sant Joan de Déu y el Hospital Clínic de Barcelona se han aliado para crear un nuevo Centro de Cardiopatías Congénitas, que atenderá y asistirá a los niños nacidos con una malformación en el corazón a lo largo de su vida. Ambas entidades sanitarias han presentado el nuevo centro este lunes 8 de abril.
A la presentación han asistido el consejero de Salut, Manel Balcells; Marta Sitges, directora del Instituto Cardiovascular del Hospital Clínic Barcelona; Stefano Congiu, jefe de cirugía cardiovascular del Hospital Sant Joan de Déu y el Dr. Daniel Pereda, director del nuevo centro.
El Centro tendrá dos sedes: una en el Hospital Sant Joan de Déu, en Esplugues, y otra en el Hospital Clínic de Barcelona. Contará con un equipo integrado por 23 profesionales, incluyendo cirujanos cardiovasculares, cardiólogos, pediatras y anestesiólogos.
En Cataluña, cada año se registran 600 nacimientos de niños con una cardiopatía congénita. Esta condición puede venir de un problema en la estructura del corazón (como las cavidades o las válvulas cardíacas) o en los grandes vasos del tórax. En el 30% de los casos, los pacientes presentan una cardiopatía grave. Debido a los avances de las últimas décadas, un 95% de estos niños logran llegar a la edad adulta, aunque requieren atención especializada.
El Centro de Cardiopatías Congénitas Sant Joan de Déu – Clínic Barcelona ofrecerá esta atención requerida, al tratarse de un centro especializado. El centro aplica una asistencia multidisciplinaria de alta calidad, así como una estrategia de seguimiento a largo plazo para garantizar su continuidad en la vida adulta.
El nuevo centro ha incorporado técnicas quirúrgicas que todavía no se habían aplicado a la población infantil, como las cirugías toracoscópicas y las cirugías robóticas. Hasta ahora, los niños y jóvenes afectados por cardiopatías congénitas que debían pasar por quirófano, se sometían a cirugías abiertas. Este tipo de procedimiento requiere un periodo de recuperación postoperatorio de larga duración, y además causa un mayor perjuicio estético. Ahora, con las nuevas técnicas quirúrgicas, menos invasivas, se reducirá el periodo de recuperación.
El centro ya ha realizado un total de cinco intervenciones quirúrgicas en niños. En tres ocasiones, los profesionales han aplicado la cirugía toracoscópica, que implica hacer pequeñas incisiones en el tórax del niño para insertar un dispositivo con una cámara de vídeo y los instrumentos necesarios para llevar a cabo la operación.
Las otras dos intervenciones han requerido cirugía cardíaca robótica. La primera paciente intervenida con este método ha sido una joven de 13 años, en noviembre del año 2023. La paciente tenía una comunicación interauricular congénita y un defecto en la válvula mitral, que causaban una circulación anómala de la sangre en el corazón y un desequilibrio que sobrecargaba la banda derecha del corazón.
La patología de esta paciente se vio agravada por una escoliosis muy acentuada. Por esta razón, los profesionales del Centro la han atendido con un robot quirúrgico. A través de cuatro pequeñas incisiones en el tórax de la paciente, de 8 milímetros de diámetro cada una, han podido introducir una cámara en el corazón. Gracias a la asistencia robótica, un equipo médico del Centro de Cardiopatías Congénitas ha logrado cerrar la conexión entre las dos aurículas y reparar la válvula mitral dañada.
Según ha informado Daniel Pereda, director del centro, la cirugía robótica infantil está restringida a la edad y el tamaño de los pacientes, pues los instrumentos quirúrgicos están diseñados a atender a pacientes de edad adulta. Por esto mismo, por ahora solo los niños mayores y los adolescentes pueden someterse a este tipo de cirugía.
Según los profesionales del Centro, la meta es realizar alrededor de doce cirugías mínimamente invasivas utilizando cirugía robótica cada año, y comenzar con una actividad anual de 20 cirugías toracoscópicas.