La compañía Aigües de Barcelona ha confirmado, este miércoles 8 de mayo, que está comprometida a seguir llevando a cabo las inversiones necesarias para enfrentar la sequía actual. Por tanto, el Consejo de Administración de la compañía ha ratificado oficialmente el Plan de inversiones por sequía, acordado con las administraciones del territorio,y dejando a un lado así los rumores sobre la paralización de los proyectos por las presiones de su socio francés Veolia.
El Consejo ha aprobado "que la Sociedad continúe ejecutando todas las actuaciones en curso y las proyectadas hasta la Ley 9/2023, del 19 de mayo, de medidas extraordinarias y urgentes para abordar la situación de sequía excepcional en Cataluña, con el objetivo de garantizar la resiliencia del servicio metropolitano del Ciclo Integral del Agua, en total colaboración con las administraciones competentes".
La empresa seguirá manteniendo su modelo colaborativo público-privado, y seguirá estableciendo diálogos constantes con la ciudadanía, los trabajadores, las administraciones y los accionistas del territorio.
Según ha revelado la compañía, la inversión necesaria para estas actuaciones asciende a 95 millones de euros. Mediante el nuevo Plan de inversiones, la compañía impulsará varias acciones pensadas para aprovechar todos los recursos hídricos, así como mejorar la resiliencia y el estado de las infraestructuras del ciclo del agua.
Como parte de este Plan, Aigües de Barcelona financiará la puesta en marcha de una instalación que conecte directamente el agua de origen subterráneo con la línea de tratamiento de ozonización y filtros de carbón activo, en la estación de tratamiento de agua potable (ETAP) de Sant Joan Despí. También está prevista la ampliación de la estación de tratamiento de la ETAP, para convertirla en la plaza más avanzada de Europa y aumentar la resiliencia y su capacidad de tratamiento.
El Plan incluye, además, la creación de un nuevo campo de pozos en Santa Coloma de Cervelló, Sant Joan Despí y Sant Feliu, que ya está en marcha. Su objetivo es extraer agua de la parte alta del acuífero del Baix Llobregat y transportarla al ETAP de Sant Joan Despí para obtener un recurso de 0,8 m³/s. Además, estos pozos permitirán recargar el acuífero cuando sea posible.
Por otro lado, en Sant Feliu ya están en marcha los trabajos en los pozos Estrella, en los que se está construyendo una nueva línea de ósmosis inversa y una nueva línea de carbón activo para garantizar el aprovechamiento del acuífero y la calidad del recurso necesario en el actual contexto de sequía. Se espera que esta actuación finalice en el primer trimestre del 2025.