PSC-PSOE ha vuelto a ganar este domingo 9 de junio (9J) las elecciones europeas en L’Hospitalet y Baix Llobregat de forma inapelable, aunque ha perdido 17.670 votantes respecto a los comicios de 2019 (a razón de 112.452 en el Baix y 5.218 en L’Hospitalet). Aún así, el socialismo ha cosechado unos resultados espectaculares con mejores porcentajes en los escrutinios: el 44,3% de los votos y 32.491 papeletas en L’Hospitalet (frente al 37.68 % del 2019) y el 37,84% de los votos -103.598 papeletas- en el Baix Llobregat (mejorando ostensiblemente el 31.01% de 2019).
La pérdida de sufragios del socialismo en el territorio es atribuible en parte a una caída de la participación: 41,82% en L’Hospitalet (57.17% en 2019) y un 44,47% en el Baix (62,28% en 2019), aunque cabe recordar que la anterior cita electoral europea coincidió con las elecciones municipales. Está por ver si la imputación de Begoña Gómez por resunta corrupción o la aprobación de la Ley de Amnistía han influido también negativamente en un electorado prácticamente inmune a cualquier mensaje o información que no provenga de su partido de cabecera.
El otro gran vencedor de la contienda ha sido el PP que se convierte en la segunda fuerza política en el territorio, pasando por encima de las formaciones independentistas mayoritarias: Junts y ERC (que se presentó a las europeas bajo el paraguas de Ara Repúbliques). Los populares han conseguido 12.418 votos en la segunda ciudad de Cataluña (16,93% del total) y 42.779 votos (15,63%) en el Baix Llobregat. En 2019, la formación que dirige Alberto Núñez Feijoo atrajo a 6.718 votantes (6,71%) en L’Hospitalet y recogió otros 20.269 votos (5,42%) en el Baix Llobregat, lo que supone más que duplicar las cifras de la anterior cita con las urnas, en la línea de los resultados de las últimas elecciones autonómicas catalanas.
La apisonadora del PP ha dejado atrás a ERC (ARA Repúbliques) tanto en L’Hospitalet, donde solo ha cosechado 6.428 votos (8,76%, frente a las 14.727 papeletas y el 14.72% de 2019), como en el Baix, donde ha obtenido cifras algo mejores: 33.199 votos (12,13%) muy lejos de los 70.380 sufragios de 2019 (18,81%), pues representa menos de la mitad en todo el territorio.
La otra pata del independentismo mayoritario (Junts) también ha sufrido un notable descalabro en las urnas de L’Hospitalet -4.036 votos (5,5%) frente a los 11.301 votos (11.29%) de 2019- y, por ende, en el Baix Llobregat: solo 25.881 votos (9,45%) frente a los 59.981 votos (16,03%) de 2019. Estos resultados convierten a los acólitos de Carles Puigdemont en la cuarta fuerza política en L’Hospitalet y la tercera en el Baix.
Mejor le han ido las cosas en el territorio a VOX, en consonancia con el auge de las formaciones de la derecha dura que se ha impuesto en gran parte de Europa, con especial relevancia en Francia e Italia y en algo menor grado, Alemania. Los de Santiago Abascal han (más que) duplicado resultados en todo el territorio y se consolidan como la tercera fuerza en L’Hospitalet y la cuarta en el Baix, en un dispar tira y afloja con el independentismo por las posiciones en el podio. En la segunda ciudad de Cataluña VOX ha obtenido 5.385 votos (7,34%), frente a los 2.664 (2,66%) de 2019 mientras que en el Baix las urnas le han deparado 18.638 papeletas (6,81%) frente a las 8.631 de 2019 (2,31%).
Los otros grandes derrotados en las urnas europeas, después de los partidos separatistas, han sido los socios de gobierno de los socialistas y que en el territorio se presentaban por separado como Comuns Sumar y Podemos. Así, en L’Hospitalet la amalgama de Yolanda Díaz y Ada Colau solo ha recogido 3.153 votos (4,29%) mientras que la marca de Pablo Iglesias e Irene Montero se ha hecho con una pizca más: 3.453 votos (4,7%). En los comicios anteriores la lista única (Podemos) recogió 11.469 papeletas, frente a los 6.606 que han reunido las dos siglas en estos comicios, dejándose por el camino el apoyo de 4.863 electores, casi la mitad.
En el Baix Llobregat no le han ido mucho mejor las cosas a comunes y podemitas. Estos últimos (Podemos) se han impuesto a sus competidores en el extremo izquierdo del espectro político (Comuns-Sumar) por un estrecho margen: 12.902 votos (4,71%) contra 12.804 votos (4,68%), 25.606 en suma. En 2019, la lista única de la entonces formación violeta amasó 42.867 votos (11,46%) lo que significa que en cinco años se han dejado por el camino 17.161 sufragios, es decir un 40%.
La gran sorpresa electoral la ha protagonizado en el territorio la lista de Se acabó La Fiesta, que encabeza el activista digital Alvise Pérez, que ha conseguido 2.137 votos en L’Hospitalet (2,91% de los sufragios) y otros 10.047 votos (3,67%) en el Baix Llobregat, pisándole los talones a comuns y podemitas.
Las elecciones europeas también han traído consigo un doloroso y triste epitafio: la constatación de la muerte política de Ciutadans (Cs). La otrora exitosa formación naranja apenas ha reunido 55 votos en L’Hospitalet (0,75%) y 1.896 votos (0,69%) en el Baix Llobregat. En 2019, el partido que ganó las elecciones autonómicas con Inés Arrimadas como abanderada, consiguió 6.794 votos en L’Hospitalet (8,91) y 39.401 papeletas en el Baix (10,53%).