Volver al colegio puede llegar a ser toda una odisea para los más pequeños: volver a madrugar, volver a los deberes y a los exámenes, volver a la rutina… Pero para las familias, la llegada de septiembre y del nuevo curso se traduce, sobre todo, en gastos. El desembolso que supone equipar a los niños con todos los libros y el material escolar puede llevar a muchas familias a apretarse bien el cinturón durante los últimos días de agosto para afrontar el golpe en el bolsillo de las compras de septiembre.
Según los datos que ha recopilado la tienda online de cartuchos de impresoras 123tinta.es, la mitad de las familias españolas invierte entre 100 y 300 euros en compras para el curso escolar durante el mes de septiembre, aunque el 20% llega a gastar entre 300 y 500 euros.
De hecho, el gasto total de las familias en productos escolares ha ido aumentando progresivamente con los años, por lo que muchas miran con temor el calendario deseando que no llegue septiembre. Por ello, para calmar los ‘estreses económicos’ de las primeras semanas del noveno mes, 123tinta.es ha compartido seis consejos para que las familias que se enfrentan a este reto puedan ahorrar durante las compras de material escolar.
Como en todo el proceso de la vuelta al cole, lo primordial y básico es la organización. Es recomendable establecer un presupuesto antes de lanzarse a comprar, porque muchas veces los impulsos piensan antes que la cartera. Si se tiene una idea clara de cuánto se puede gastar, así como una lista del material indispensable, será mucho más probable evitar los gastos innecesarios y las sorpresas a final de mes.
Además de una lista, es muy útil hacer una pequeña revisión de todo el material del curso anterior que aún se puede utilizar: mochilas, cuadernos, lápices, material de pintura, etc. De este modo, evitaremos volver a comprar material innecesario y reduciremos mucho los gastos. Por lo tanto, antes de hacer una lista de lo que falta, es aconsejable hacerla de lo que ya se tiene.
Otro de los problemas que disparan los recibos durante la época de la vuelta al cole, es la creencia de que hay que comprarlo todo a la vez (“no vaya a ser…”). Pero realmente no es necesario, y es mucho más recomendable comprar por partes: primero, todo lo indispensable para los primeros días de clase (folios, bolígrafos, cuadernos…); después, el resto de material puede irse comprando según vaya surgiendo la necesidad.
Además, con el comienzo del curso llega el mayor de los gastos, los libros de texto, que todavía encarecen más la vuelta al cole. Por eso, es mucho mejor que la primera compra sea más pequeña, para poder hacer frente al gasto de los libros, y después ir comprando todo aquello que falte. De hecho, muchas veces algunas tiendas ofrecen descuentos o ‘liquidaciones’ una vez se pasa la euforia de las primeras semanas de septiembre, por lo que es preferible dejar algunas cosas para después.
Por otro lado, igual que en el supermercado comparamos marcas y buscamos la opción más rentable, lo mismo puede hacerse con el material escolar. Podemos comparar precios entre marcas e incluso tiendas, para encontrar la que más se ajuste a nuestro presupuesto. La compra online también es aconsejable, porque estas tiendas suelen ofrecer precios más competitivos y asequibles.
Al comparar marcas, tampoco tenemos que dejarnos llevar por las modas. Ya desde las últimas semanas de agosto, las marcas se preparan para la vuelta al cole y nos bombardean con campañas publicitarias, lo que muchas veces puede llegar a nublar nuestro criterio. Las tendencias siempre nos atraen, y en especial a los más pequeños, y muchas veces llegamos a gastar de más, llamados por las grandes marcas o los diseños ‘bonitos’ o que llevan la imagen de personajes de dibujos animados. De hecho, los expertos aseguran que llegamos a gastar un 40% más de lo necesario simplemente llamados por las tendencias.
Por último, está la alternativa de intercambiar en vez de comprar. Muchas escuelas promueven el intercambio de materiales entre familias, sobre todo de uniformes. De este modo, las familias con un presupuesto más limitado pueden acceder al material necesario sin tener que hacer grandes sacrificios.