El Festival Altaveu en Sant Boi ha hecho entrega de los galardones de los Premis Altaveu 2024, que reconocen a artistas destacados del panorama musical catalán. Este año, el jurado ha premiado a las jóvenes cantautoras Mar Puyol y Rita Payés, a la sincera 'rapera' Lia Kali, a la banda de rock català La Ludwig Band, al grupo de thrash metal Crisix y al sello Kasba Music tras 20 años en el mundo discográfico. Además, el jurado ha concedido el Premio Especial al dúo Estopa, en honor a su éxito irrefrenable durante 25 años de trayectoria musical.
Este jueves 12 de septiembre, el Festival Altaveu (Sant Boi) ha celebrado la ceremonia de entrega de los Premis Altaveu 2024, a las 20h en Can Massallera. Estos galardones reconocen a los artistas y las entidades que han tenido un impacto significativo en el panorama musical catalán durante el año, por su originalidad, su creatividad y su pasión por la música.
Detrás de los galardones de esta edición, hay un jurado profesional compuesto por Alícia Rodríguez, el redactor y melómano Toni Castarnado, la reportera Irene Desumbila, el periodista Vicente Merino, el guitarrista Sergi Núñez y el crítico musical Joan Lluna. El jurado, todos con un fuerte vínculo con el mundo de la música, ha decidido premiar a cinco artistas y a un sello discográfico, además de un premio especial que reconoce la larga trayectoria musical de uno de los grandes artistas de Cornellà.
Así, el Premio Especial del Jurado a la Trayectoria ha sido para nada más y nada menos que Estopa. Los hermanos Muñoz, el dúo estelar que ha conquistado Cataluña, España y el mundo más allá del charco, celebran ya 25 años de carrera musical. Los dos hermanos han logrado popularizar la rumba catalana con sus icónicas canciones (que nadie se niega a cantar en un karaoke) que tratan de la vida más cotidiana y humilde a través de letras llenas de carisma y humor. Por sus múltiples logros y triunfos (como llenar el Estadi Olímpic Lluís Companys) y por su extraordinaria trayectoria que ha roto las barreras generacionales, el jurado ha concedido el Premio Especial a Estopa, todo un fenómeno musical.
Uno de los premios de esta edición ha sido para la joven cantautora Mar Pujol, que ha publicado en febrero de este año su primer LP Cançons de rebost. Con tan solo 22 años, Pujol se lanzó al mundo de la música con un estilo sencillo pero íntimo, que busca llegar a lo más profundo de sus oyentes. Esta conexión con su audiencia a través de la música le ha concedido el honor de llevarse a casa un este galardón.
Otra cara joven que se ha llevado un Premio Altaveu es Rita Payés, compositora y trombonista, una fuerza imparable que está ascendiendo hacia las estrellas del cielo de la música. Con 24 años, la artista ya ha consolidado una trayectoria musical, gracias a sus colaboraciones con grandes nombres, como C. Tangana, Silvia Pérez Cruz y Jon Batiste. Este año ha publicado su último título, De camino al camino, una propuesta que fusiona el jazz ‘de toda la vida’ con los nuevos estilos del panorama musical. El jurado la ha elegido “digna” de este galardón por “su talento magnético y su capacidad de brillar en cualquier proyecto”.
Además de artistas en solitario, el jurado también ha premiado a dos bandas del panorama musical catalán. Por un lado, La Ludwig Band, una formación que se ha propuesto “revitalizar” el género del rock català, con toques de Springsteen, Pau Riba y Sisa. Los Premios Altaveu han reconocido “la brillante demostración de la capacidad interpretativa y narrativa” que ha logrado la banda con su última entrega, Gràcies per venir.
La otra banda que ha conquistado al jurado es Crisix, un grupo de thrash metal que se está ganando el reconocimiento internacional. Con un sonido energético y potente, la banda ha subido a escenarios de todo el mundo, desde grandes festivales de heavy metal europeos hasta su propia gira por América Latina. El jurado de los Premios ha querido reconocer a la banda por su proyección internacional, que “está demostrando que el futuro del metal está más que asegurado”.
La voz “vibrante” y el discurso “profundo y sincero” de Lia Kali, una de las estrellas emergentes en el mundo del rap y la música urbana, la han hecho “digna” de un Premio Altaveu. Su último álbum, Contra Todo Pronóstico, se sumerge en problemáticas invisibilizadas del día a día, como la salud mental o el maltrato institucional, a través de una mirada profunda y emocional. Por llevar el corazón en su puño y letra, y por mantener “una fidelidad a la independencia artística” durante toda su trayectoria musical, el jurado ha visto en Lia Kali a toda una ganadora.
El último de los Premios Altaveu ha sido para el sello discográfico Kasba Music, que ya celebra los 20 años alzando la voz de proyectos musicales inconformistas y genuinos, con una mirada abierta a las nuevas tendencias y a las fusiones de géneros, sin esconder su gusto por el punk y el rock. Estas dos décadas de “resistencia musical y social” que han convertido a la discográfica en “un referente de honestidad y compromiso” en el panorama musical, le han otorgado el gran reconocimiento del jurado de los Premios Altaveu.