Los Mossos d'Esquadra han recuperado 93 cajas de tabaco robado, cuyo valor supera el millón de euros, en una furgoneta estacionada en Sant Andreu de la Barca. Unos días antes, un hombre de Sant Boi había denunciado el robo de esa misma furgoneta. Los agentes han podido devolver todo el tabaco sustraído a la empresa propietaria, ubicada en un área de servicio de la autopista A-2. Todavía no ha habido detenciones, por lo que la investigación continúa en marcha.
Los Mossos d'Esquadra han recuperado, este martes 10 de septiembre, 93 cajas llenas de tabaco robado en una furgoneta (también robada) que estaba estacionada en Sant Andreu de la Barca. Con este ‘hallazgo’, los agentes han resuelto un robo dentro de otro robo, casi como una muñeca matrioska.
Los hechos comienzan a principios del mes de septiembre. El propietario de una furgoneta denuncia el robo de su vehículo en la localidad de Sant Boi. Unos pocos días después, el día 10 de septiembre alrededor de las 11h de la mañana, agentes de la comisaría de Martorell la localizan estacionada en Sant Andreu de la Barca. Encontrada la furgoneta, los agentes la inspeccionan para intentar identificar al ladrón, que sigue siendo una incógnita.
Lo que no esperan encontrar dentro de la furgoneta son 93 cajas de cartón, que el propietario de la furgoneta no identifica como suyas. Al abrir las cajas, los agentes se encuentran con paquetes y paquetes de tabaco de una conocida marca internacional. Todo apunta, pues, a que el mismo delincuente que había robado la furgoneta se había hecho con todas estas cajas de manera ilícita, y no había mejor lugar para almacenarlas que una espaciosa furgoneta.
¿El siguiente paso? Encontrar el lugar de donde se habrían sustraído las cajas de tabaco. Gracias a la colaboración de los agentes de la Oficina de Atención al Ciudadano de la comisaría de Martorell, han podido trazar el origen de la mercancía robada: un área de servicio de la autopista A-2 en el término municipal de Jorba (Anoia). Según las investigaciones, el tabaco habría sido robado durante la misma madrugada del martes 10 de septiembre y después escondido en la furgoneta, que ya llevaba unos días lejos de su verdadero dueño.
La empresa propietaria ha podido recuperar su mercancía ‘perdida’, que asciende a un valor de 1.132.000 euros. Sin embargo, a pesar de que todo ha vuelto a su legítimo dueño, el caso no termina aquí. Los agentes están actualmente en búsqueda del autor (o los autores) de este doble robo, pues todavía no ha habido detenciones ni se ha identificado a ningún sospechoso.