El Hospital Universitario de Bellvitge ha realizado el primer trasplante facial en asistolia controlada a un hombre de 47 años con un tumor gigante en el rostro, un procedimiento que jamás se había realizado antes en ningún hospital del mundo. La intervención ha durado 12 horas, y ha requerido la coordinación de un equipo multidisciplinario formado por 60 profesionales. El procedimiento ha sido todo un éxito, y el paciente se está recuperando según lo previsto. El Hospital de Bellvitge es uno de los únicos 18 centros hospitalarios del mundo que han realizado un trasplante facial.
El Hospital Universitario de Bellvitge (HUB) ha logrado un hito inigualable. El jueves 19 de septiembre, el Servicio de Cirugía Plástica y Reparadora ha realizado el primer trasplante facial de toda la historia del hospital, y el primero de todo el mundo en hacerse en asistolia controlada. Y no solo eso: el procedimiento ha sido todo un éxito, y actualmente el paciente está recuperándose sin complicaciones.
Este trasplante ha sido pionero en el mundo, porque los tejidos no se han obtenido de un donante en muerte encefálica, sino en asistolia controlada. Es decir, mientras el ‘donante’ tenía el corazón parado, los profesionales han podido extraer el corazón, la cara y los riñones. El Hospital ya cuenta con una larga trayectoria y experiencia en la obtención de órganos mediante el procedimiento de asistolia, pero esta es la primera vez que los emplea para un trasplante facial.
La intervención tiene una extrema complejidad, tanto técnica como organizativa, por lo que ha requerido la colaboración de hasta 60 profesionales de diez disciplinas médicas y quirúrgicas distintas. Este ingente equipo ha contado con el liderazgo de la Dra. Anna López Ojeda, jefa del Servicio, y del Dr. Oriol Bermejo, jefe de sección, en coordinación con el Dr. Gabriel Moreno González, director de Trasplantes.
El paciente que ha recibido el trasplante es un hombre de 47 años que sufre neurofibromatosis de tipo 1, una enfermedad hereditaria que provoca la formación de tumores benignos en los tejidos nerviosos del cuerpo e incluso de la cara. En este caso, el paciente tenía un tumor plexiforme gigante en la mitad derecha de la cara, que además de afectarle estéticamente, le impedía mover correctamente los músculos de la cara y le dificultaba la visión. A raíz de ello, el paciente sufría varias dificultades psicológicas y sociales, por lo que la operación era más que urgente y no había otro tratamiento posible, aunque tuviera que realizarse por primera vez.
Durante la intervención, los cirujanos le han extirpado el tumor de la cara, lo que ha obligado a extraerle también el labio superior, la nariz, el párpado del ojo derecho y toda la mitad derecha del rostro y el cuero cabelludo del mismo lado. Para sustituir estas partes, los profesionales han implantado la cara del donante (tras realizar previamente la extirpación en asistolia controlada), que pronto adquirirá la forma de la cara del receptor, en cuanto se acomode a su estructura ósea durante el proceso de recuperación. Para poder implantar el rostro donado, ha sido necesario conectar una arteria, cuatro venas y cuatro nervios con el nuevo tejido. En total, el procedimiento ha requerido hasta 12 horas en el quirófano.
Dr. Oriol Bermejo, uno de los líderes de este asombroso procedimiento, ha asegurado que lo más difícil (“hacer el primer trasplante”) ya ha pasado, y el Hospital ya está “preparado para repetirlo si vuelve a surgir la ocasión”. Por su parte, la Dra. Anna López Ojeda, ha apuntado que el verdadero “reto” de la cirugía “no solo ha sido la complejidad técnica, sino coordinar perfectamente un grupo muy grande y heterogéneo de profesionales”. Pero esa ha sido “la gran clave del éxito”, ha asegurado la doctora. En esta misma línea, el Dr. Bermejo, ha añadido que la amplia experiencia del Hospital en el trabajo multidisciplinar ha hecho posible este éxito, una experiencia que “ha quedado más patente que nunca” tras la operación.
El tercer profesional a cargo del liderazgo del procedimiento, el Dr. Gabriel Moreno González, director de Trasplantes, ha explicado que el mismo 19 de septiembre, los profesionales del hospital han realizado de forma “casi simultánea” otras cuatro intervenciones complejas y urgentes: un trasplante cardíaco, un trasplante hepático y un trasplante renal, además de una disección aórtica. Para el Dr. Moreno, este hito es “prácticamente inalcanzable para otros centros médicos”, y es una prueba de que “los profesionales de Bellvitge tienen una gran capacidad para sacar adelante retos de gran dificultad”. Para el doctor, el equipo del Hospital tiene una gran “capacidad de adaptación” para dar respuesta a situaciones como las que ha vivido en un solo día de septiembre, “en lo que se refiere a la experiencia y a la disponibilidad horaria”.
Haber realizado con éxito un trasplante de cara es un gran logro para el Hospital de Bellvitge. Hasta ahora, solo 18 centros hospitalarios de todo el mundo han podido llevar a cabo esta intervención quirúrgica de extrema complejidad, porque requiere un equipo sólido de expertos entrenados en varias áreas y un cuerpo especializado en anestesiología y enfermería con experiencia en trasplantes.
De estos 18 centros, cuatro son españoles: junto al Hospital de Bellvitge, el Hospital Universitario y Politécnico La Fe de Valencia (que realizó con éxito un trasplante facial en 2009), el Hospital Universitario Virgen del Rocío de Sevilla (en 2010) y el Hospital Universitari Vall d'Hebron (con dos trasplantes, uno en 2010 y otro en 2015). Así, desde 2015 ningún hospital español había vuelto a llevar a cabo este procedimiento, hasta la reciente victoria del Hospital de Bellvitge.