Agentes de los Mossos d'Esquadra y de la Guardia Urbana han descubierto varias habitaciones ilegales construidas en el sótano de un local de la calle de Besa (Collblanc). Los delincuentes habrían construido estas pequeñas viviendas en un espacio de uso no residencial, y con unas condiciones de higiene y seguridad nulas. Los agentes han paralizado las obras y han puesto la denuncia correspondiente.
Un pequeño local de la calle de Besa, en el barrio de Collblanc (L’Hospitalet), ocultaba todo un bloque de apartamentos ilegal en su sótano. La unión de varios cuerpos de seguridad del municipio en una operación policial conjunta, este martes 5 de noviembre, ha permitido paralizar por completo las obras de construcción de estas viviendas ilegales.
Este ‘complejo residencial’ clandestino tenía ya construidas once habitaciones en el sótano, junto con cuatro cuartos de baño y dos cocinas en unas condiciones totalmente insalubres. Además, hay una estación transformadora de Fecsa-Endesa al fondo del local, a la que necesariamente deben poder acceder los técnicos de mantenimiento en todo momento, lo que imposibilita y prohíbe cualquier uso residencial del espacio.
A pesar de las dudosas condiciones de higiene y seguridad y de la prohibición de la estación transformadora, las viviendas se estaban construyendo. Hasta que este martes, un dispositivo formado por agentes de los Mossos d’Esquadra, de la Unidad de Convivencia de la Guardia Urbana de L’Hospitalet y del Departamento de Urbanismo, han acudido hasta el local de la calle Besa y han paralizado completamente las obras. Las administraciones policiales ya han puesto una denuncia por construcción ilegal de viviendas que suponen un alto riesgo para la seguridad.