El Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible ha adjudicado la redacción del proyecto de construcción del tramo entre el enlace de Cornellà y el kilómetro 0,510 de la futura autovía B-21, un nuevo acceso directo al Port de Barcelona por carretera. Este proyecto constituye la primera fase de las actuaciones para reforzar las conexiones del Port de Barcelona con los municipios del entorno, a través de la creación de nuevos accesos desde el sur, tanto viarios como ferroviarios.
En esta primera fase, recién adjudicada, la Dirección General de Carreteras del Ministerio gestionará el proyecto de trazado y construcción de la futura autovía B-21, con las actuaciones de mejora necesarias para reforzar las conexiones. Entre ellas, la ampliación de la plataforma de la autovía A-2, en el enlace de Cornellà, para dotar a la calzada de un carril más en cada sentido, así como la sustitución de un paso superior sobre la misma carretera. A raíz de esta ampliación de los carriles, el proyecto incluye también la prolongación de las obras de drenaje actuales, para adaptarse a los nuevos anchos de la plataforma.
Dentro de esta misma fase, se ampliarán las seis estructuras actuales y se construirán otras tres: la E8, que cruzará la autovía A-2; y las estructuras E7 y E9, de cruce sobre la riera del antiguo cauce del Llobregat. Paralelamente se levantarán muros de hormigón armado en este nuevo tramo y se repondrán varios caminos de servicio ligeramente deteriorados.
El Ministerio de Transportes no descarta futuras actuaciones adicionales, una vez analizado este primer proyecto básico pendiente de redacción. Antes del inicio de las obras. el Ministerio llevará a cabo un nuevo estudio de tráfico sobre el tramo para comprobar si existen necesidades adicionales en el tramo. Por ejemplo, podría incluirse también en este primer proyecto el diseño de la confluencia-bifurcación de este nuevo acceso al Port con los enlaces de Cornellà y L’Hospitalet.
Esta primera fase del proyecto, según las estimaciones previas a la redacción definitiva, contempla un presupuesto total de 98,5 millones de euros (IVA incluido).
La segunda fase del proyecto, gestionada por Adif, incluye la construcción del acceso ferroviario, así como la continuación de la B-21 desde el km 0,510 (justo el límite del tramo del primer proyecto) hasta su final, en el km 5.143. Adif ya ha licitado la redacción de este segundo proyecto, que se realizará de forma coordinada con el primero, para asegurar la eficacia y consolidación de la nueva carretera de acceso al puerto.
Estas actuaciones se enmarcan en el protocolo de colaboración entre el Ministerio de Transportes, la Generalitat, la gestora ferroviaria ADIF, Puertos del Estado y la Autoridad Portuaria de Barcelona (APB), que incluye el desarrollo de un nuevo Nodo Logístico de Barcelona y la creación de nuevos accesos sur al Port. El Gobierno de España ha aprobado definitivamente la financiación de este macroproyecto, una inversión que asciende a un total de 730 millones de euros.