Lluis M Estruch | Miércoles 17 de septiembre de 2014
No existe. No se les ocurriría en la lacustre Suiza crearla, es cara. Ahora están pensando en renovar sus añejos aviones de caza, los sustitutos son usados y se considera su alquiler o patrocinio.
Años atrás, crearon el cantón de Jura, y se arrepienten por caro. En Suiza, los funcionarios, tienen el mismo reglamento laboral que los que no. Faltaría. La tensión fiscal entre Zurich-Ginebra es eterna y la pugna lingüística entre el alemán-francés, ardua. Sin embargo el país va; es así que la fortuna Pujol está allí. Pragmatismo, eficacia y estabilidad burguesa: son sus rasgos. Pasemos del país modelo para: Foix y Espriu… a una Cataluña vocinglera, con líderes lenguaraces y desleales, que se pasan la vida en “manis” y discursos de balcón, gritando ante la masa por convencer.
Europa y el IV Reich alemán, les dice: “Si salís, no entraréis.” Ellos lo ignoran en su tonta soberbia. Enfocan sus protestas, como un partido, no un Escocia-Inglaterra o un Flandes-Valonia; sino como un R. Madrid-Barça, con hinchas radicales. Por un tiempo se admiró a ETA, ya se abandonó el camino imitativo vasco. Ahora inseguros en la vía a seguir, unos gritan Kosovo, otros… aunque Cataluña ya fue independiente (1641) pero no mantenía el orden interno, y buscó la Protección de Luis XIII de Francia.
De los Austrias a los Borbones y a la inversa. No como la República Veneciana, por ejemplo. Siempre de “Herodes a Pilatos”, pero con malestar. Sin la necesaria autocrítica y como decía Tarradellas: “En política no se puede hacer el ridículo”, camino de ello, porque si Mas y Junqueras triunfasen, -Cataluña- sería una gran zona franca, para contrabandear y jugar en casinos las 24h del día, con el agua, la energía y las comunicaciones en manos galas. Con muchos funcionarios y prácticas políticas más propias de Albania que de Dinamarca. Por lo cual habría: aduanas, ejército, aviación militar y por supuesto marina de guerra, en esto sí superaríamos a la envidiada y austera Suiza.