El partido cuenta con círculos en 22 municipios del Baix y su resultado determinará el gobierno en muchos ayuntamientos. La voluntad es generar candidaturas para las municipales, aunque crece la desconfianza por parte de la dirección
Están temblando. Es indudable que los partidos mayoritarios -todos: PSC, PP, CiU, pero también Iniciativa (o Izquierda Unida)- están ya mirando de reojo cada paso que da el movimiento Podemos, ante lo que puede suponer su candidatura en las municipales de 2015. El lila de Podemos se ha hecho hueco en el ‘pantone’ político con una organización que recupera el movimiento asambleario como eje vertebrador, con un discurso renovador y con una actitud movilizadora en contra del ‘status quo’ actual. Recogen el descontento, pero sobre todo –dicen- han devuelto la ilusión a muchos que ya confían en el fenómeno Podemos. Un fenómeno que desde las Europeas continúa extendiéndose sin mesura también en el Baix Llobregat y en L’Hospitalet. De hecho, los diferentes círculos de Podemos ya están activos –y reconocidos por la organización central- en 22 de los 31 municipios.
El poder de un ‘Me gusta’L’Hospitalet, Castelldefels, Sant Boi, Gavà o Viladecans fueron las cinco primeras ciudades que apoyaron la creación de Podemos cuando todavía era un embrión. Si la cara de Podemos es la de Pablo Iglesias, su éxito se debe a un sin fin de ciudadanos anónimos que ya en su momento decidieron –de manera espontánea- dar apoyo al proyecto. Es el caso de Carmen González en L’Hospitalet (48 años, filóloga, ex jefa de ventas en una multinacional) o de Eduard Tobaruela (39 años, funcionario), promotor de Podemos-Viladecans.
“Empecé dando apoyo al equipo de Iglesias cuando lanzaron la propuesta de empezar a hacer campaña; ayudé a recoger firmas y fue entonces cuando, el 5 de abril, convoqué la primera reunión. Asistimos unas 12 personas”, comenta Tobaruela. El acto de presentación en el Ateneo de Entidades Pau Picasso daría forma a semanas previas de trabajo y de movilización a través de Facebook.
Esta red social es la principal vía de comunicación y de movilización, además de las propias asambleas que se realizan, normalmente, en parques y en espacios abiertos. “Da gusto ver a la gente pararse, cómo pregunta, cómo se interesa… De alguna manera te haces más cercano”, reconoce González. Y no son pocos. El ‘círculo’ de L’Hospitalet es uno de los que más apoyo recibe. “Estamos alrededor del centenar de personas implicadas. Estamos trabajando muy duro para presentarnos a las municipales”, nos avanza la promotora de Podemos en L’Hospitalet. Y lo cierto es que este equipo tiene una estructura bastante avanzada con distintas comisiones de trabajo: contenido político, comunicación, finanzas, organización, portavocía y legal. Pero todo dependerá de la decisión de la organización central. Según las últimas informaciones, Podemos ha alertado del peligro de que aspirantes municipales se aprovechen de la formación. “Mi impresión personal es que son unos comicios delicados. Hay 8.100 municipios en España y corremos el riesgo de no tener estructura y filtro que mantenga a Podemos como baluarte de la decencia y la honestidad”, ha dicho Íñigo Errejón, el responsable de campaña del partido.
Pocos ‘inputs’ tenemos pero, con los resultados de las Europeas en la mano, el Baix Llobregat está llamado a ser un pozo de votos lilas, sobre todo, gracias a las grandes ciudades.
Podemos obtuvo en la comarca (incluido L’Hospitalet) el 24’08% de sus votos en toda la provincia de Barcelona (23.761 votos de los 98.671 totales): el PSC –el más votado en la comarca- obtiene el 26’17%, mientras que el PP consigue el 20,32%. Los números de Podemos en el Baix Llobregat son igual de atractivos si los hacemos extensibles a toda Cataluña. En la comarca se registraron el 20’30% de sus votos a nivel autonómico; es decir, uno de cada cinco personas que votaron a Podemos en Cataluña, lo hizo en nuestra zona. En ningún municipio bajó del 4% de votos (Sant Climent de Llobregat) y las ciudades grandes del sur -El Prat de Llobregat (9’01%), Viladecans (8’02%), Sant Boi (7’99%), Castelldefels (7’39%), L’Hospitalet (7’09%) o Gavà (6’92%)- pusieron intensidad al lila ofreciendo los mejores resultados para el partido.
Comarca lila, pero sin coordinadora
Pese a que sí se dan contactos entre círculos, no existe oficialmente una coordinadora comarcal como tal. La jerarquización choca con el modelo: “Tiene que ser un instrumento administrativo puro y duro”, opina Carmen González. “Suena a poner liderazgos. Tiene que ser un instrumento que ayude a los diferentes círculos, pero no puede ser una estructura clásica piramidal”, comenta en el mismo sentido Eduard Tobaruela. La I gran Asamblea de Podemos definirá, tras meses de debate y enmiendas ciudadanas, el futuro lila a nivel nacional, pero también a nivel local.