Unanimidad para congelar las tarifas del transporte público por tercer año consecutivo

Reducir la movilidad del coche privado e incentivar el transporte público va a ser un reto no solo para 2017 sino en los próximos años, con el objetivo primero de agilizar la red viaria y, sobre todo, mejorar la calidad del aire metropolitano. En la decisión personal de coger el coche o ir en transporte es clave el nivel de precios de este último.

En este sentido, el Govern de la Generalitat, Àrea Metropolitana y Ayuntamiento de Barcelona han acordado hoy congelar las tarifas del transporte público tras una reunión conjunta entre el president de la Generalitat y jefe del Ejecutivo, Carles Puigdemont; el conseller de Territori i Sostenibilitat y presidente de ATM, Josep Rull; el vicepresidente de Transporte y Movilidad de AMB, Antoni Poveda; y la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau. Unanimidad, pues, entre las diferentes administraciones competentes que no suben los precios del transporte por tercer año consecutivo. “Este acuerdo es un compromiso -que compartimos de manera inexcusable-de estar al lado de los ciudadanos para garantizar un derecho básico como es el de la movilidad, no solo sostenible, sino accesible y razonable”, ha dicho el presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont.

Pero esta no ha sido la única medida. Las cuatro administraciones han acordado incrementar la edad de gratuidad del transporte público de los 15 a los 16 años, así como crear un título ambiental para episodios de contaminación atmosférica, denominada ‘T-episodi ambiental’, para favorecer el uso del transporte en momentos puntuales de alta contaminación.

Además, las administraciones representadas asumirán la mitad del déficit del transporte, que asciende a 20 millones de euros. En este sentido, pedirán al Estado que asuma la otra mitad, algo que, según ellos, “no sería diferente a lo que está haciendo con la Comunidad de Madrid. Seria dispensar exactamente el mismo trato”, ha dicho Puigdemont. Y apuntalaba: “El Estado se está retirando”, mientras que la Generalitat ha pasado a financiar el 51% del sistema, cuando en 2008 solo se encargaba del 43%.