Un grupo de entidades de la ciudad y de ámbito catalán y estatal presentan una instancia en el Ayuntamiento exigiendo poner fin a la prueba piloto del gigante chino en la ciudad, después de los constantes problemas que generan algunos usuarios de este servicio, que aparcan las bicicletas en lugares inadecuados.
Rebelión contra Mobike. Una docena de entidades han firmado un manifiesto en el que denuncian que el servicio de bicicletas eléctricas compartidas de Mobike "está generando una situación de peligro para personas con discapacidad", amén de un "auténtico desorden del espacio público".
Los efectos de la llegada de este servicio de movilidad personal son palpables con un simple paseo por la ciudad. Bicicletas aparcadas delante de bancos, en medio de las aceras, encima de los jardines, en los vestíbulos de las estaciones de metro y carrilet o delante de bancos para sentarse son algunas de las ocurrencias de una parte de los usuarios de Mobike, que con su actuación incívica pueden perjudicar a otros conciudadanos. Esto es lo que han denunciado las entidades, entre las que hay cuatro asociaciones de vecinos de la ciudad -las de Santa Eulàlia, Gornal, La Florida y la independiente de Bellvitge-, SUMEM y Acordis (Asociación Coordinadora de Personas con Discapacidad de L'Hospitalet), además de la Federación ECOM -que aglutina a más de 140 entidades en todo el país- o Catalunya Camina, entre otras.
La instancia se ha entrado en la regidoría del Distrito I, en la Rambla Just Oliveras, y va dirigida a alcaldía, a la Síndica de Greuges y a los partidos del Pleno. En el escrito se destaca que este negocio de bicicletas "está generando un impacto sobre la accesibilidad para las personas con discapacidad de la ciudad y también inconvenientes en el resto de vecinos y vecinas relacionados con el buen uso y privatización del espacio público. "No se puede ceder el espacio público a cualquiera", lamenta Arturo Portela, presidente de Sumem.
Por este motivo, los impulsores de este escrito reclaman que se ponga fin a la prueba piloto que Mobike está llevando a cabo en la ciudad, consistente en medio millar de bicicletas a las que se les unirían 1.500 más en un futuro, si siguiera adelante la implantación de esta empresa en la ciudad. No obstante, los promotores quieren destacar que "en ningún caso" están en contra de la bicicleta, que consideran como "una de las mejores propuestas de transporte sostenible y ecológico que podrían suponer una reducción de la contaminación en la ciudad".
Uno de los impulsores, el activista Óscar Martínez, asegura que el problema es el sistema de "comodidad" que ofrece la empresa, que te permite dejarla "donde te canses", vulnerando en algunos casos derechos de movilidad de los ciudadanos. De hecho, Martínez recuerda que el servicio de Mobike genera problemas similares en otras ciudades del mundo donde está implantado.
En el siguiente vídeo, grabado y cedido por Martínez, se muestra como incluso algunos usuarios, teniendo cerca una 'parada' para estacionar bicicletas -una medida que, según los impulsores de la queja, no es efectiva-, las dejan a escasos metros, en lugares no adecuados.
Los problemas que genera Mobike llegan al Pleno
Este viernes el PDeCAT llevará al Pleno una moción para intentar solucionar estos problemas de accesibilidad, aunque días atrás ERC ya hizo públicas sus discrepancias con la gestión que está llevando a cabo el Ayuntamiento de este servicio. En este sentido, el teniente de alcalde de Seguridad, Convivencia y Civismo, José M. García Mompel, aseguró el mes pasado a El Llobregat que Mobike "no está causando problemas graves" y que se trabaja con la empresa y la guardia urbana para evitar el mal uso del servicio que se hace en algunos casos.
Claro que sí @nuriamarinlh , dejar las bicis delante de los bancos es ideal para quien lleva un carrito de bebé, personas invidentes, movilidad reducida... la movilidad no solo es desplazarse en bici y no en coche. #mobikeLHpic.twitter.com/UE2zQkoOeO
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