Dos de los edificios más emblemáticos diseñados por el maestro del modernismo catalán Antoni Gaudí, vuelven a unirse 46 años después. La Cripta Gaudí de la Colònia Güell en Santa Coloma de Cervelló y el Palau Güell, en el barrio del Raval de Barcelona, cuentan desde este jueves con un descuento del 25% si se visitan ambos monumentos.
La Diputació de Barcelona y el Consorci de la Colònia Güell han llegado a un acuerdo conjunto para promocionar y potenciar el patrimonio cultural catalán y, por supuesto, del Baix Llobregat. Por eso, visitando la Cripta Gaudí y presentando la entrada en la taquilla del Palau Güell, o viceversa, se podrá obtener una tarifa reducida con la nueva entrada. Siendo la tarifa reducida de la Colònia Güell y la Cripta Gaudí de 7 euros, presentando la entrada del Palau Güell, y la del Palau Güell de 9 euros con la entrada de la colonia.
El objetivo de esta campaña es dar a conocer dos de las joyas más emblemáticas, pero a la vez desconocidas de Antoni Gaudí, promocionando dos recursos patrimoniales de primer nivel. Esta unión, que se quebró en 1973 con el cierre de la fábrica textil de la Colònia Güell, vuelve a crear esta conexión, por primera vez en 46 años, de un patrimonio de la ciudad de Barcelona con uno de los principales recursos turísticos del Baix Llobregat.
Antoni Gaudí y Eusebi Güell son el nexo de unión de estos dos edificios. El empresario Eusebi Güell encargó a Gaudí la obra del Palau Güell, su residencia, y posteriormente la construcción de la iglesia de la Colonia Güell, donde tenía la fábrica familiar.
El Palau Güell (1886)
Con esta obra nace una unión que marcará definitivamente el Modernismo en Cataluña. Eusebi Güell i Bacigalupi apuesta por Antoni Gaudí y le encarga el diseño de su residencia: un palacio en el centro de Barcelona y muy próximo al puerto.
El Palau Güell es el palacio urbano de Gaudí mejor conservado y sin modificaciones estructurales que puede visitar en Barcelona. Situado en la calle Nou de la Rambla, junto a la Rambla. Es una creación de juventud y es la esencia de toda la obra posterior del arquitecto. Sus paredes destilan riqueza, originalidad, detalles exquisitos hechos con materiales nobles.
La Cripta Gaudí y la Colònia Güell (1908)
Eusebi Güell volvió a contratar Antoni Gaudí para confiarle el diseño de una iglesia en la Colònia Güell, en Santa Coloma de Cervelló. El empresario, que luchaba por mejorar las condiciones de trabajo de la fábrica textil familiar, apostó por crear un espacio donde el personal no solo trabajara, sino en el que también pudiera vivir y disfrutar de tiempo de ocio y de religión. Así nació la cripta de la Colònia Güell, símbolo de la plenitud artística gaudiniana y parada obligada para comprender su gran obra: la Sagrada Familia.
En la Cripta Gaudí encontramos columnas inclinadas, vitrales en forma de flor, volúmenes sin ningún tipo de rigidez, arcos catenarios y una integración perfecta entre el edificio y su entorno. La iglesia incluye numerosos ejemplos del dominio que Gaudí tenía de las artes aplicadas, tanto en los elementos del mobiliario como en la ornamentación.
Además de admirar la obra de Gaudí, la Colònia Güell ofrece al visitante la posibilidad de recorrer las calles contemplando las construcciones modernistas más significativas de la vida de la colonia, también de gran interés arquitectónico. Por otro lado, se puede visitar el Centro de Interpretación, ubicado en el edificio de la antigua cooperativa de consumo con una exposición permanente para entender el conjunto de la colonia y la iglesia en particular.