Preocupación vecinal por el futuro del vertedero del Garraf

Fue clausurado y sellado hace 13 años, pero en los últimos tiempos han tenido lugar episodios de contaminación que llevan a pensar que no se hizo del todo bien. De hecho, hace meses ERC de Gavà presentó una propuesta en el Pleno para que instase al Área Metropolitana de Barcelona (AMB) a sellar este vertedero de manera urgente y efectiva. Y es que en los últimos meses los vecinos han detectado malos olores en la desembocadura del río subterráneo de la Falconera, donde se constata que el agua sale de color marrón y cargada de elementos tóxicos, debido a que estaría penetrando la masa de residuos enterrados en la Vall de Joan.

Esto no quedaría aquí, puesto que en la propia zona de Vall de Joan se mantiene un fuerte olor a metano, fruto de fugas que no estaría recogiendo la central de biogás instalada allí para convertirlo en energía. Las obras de sellado y recuperación de la zona se han retomado este 2019 -después del parón en 2010- y, según el AMB, tardarán una media de ocho años en completarse. El proyecto actua sobre 20 hectáreas y el objetivo es que, a largo plazo, se pueda pasear por allí, cosa que desaconsejan actualmente las autoridades.

Por todo ello, la preocupación por la situación real de esta zona crece. Este viernes, el Escorxador de Begues acogerá una mesa redonda con expertos que analizarán el estado del antiguo vertedero del área metropolitana y el río subterráneo que transcurre por allí. El Centre d'Estudis Beguetans, el grupo ecologista Quercus y la Unió Muntanyenca Eramprunyà organizan el encuentro con Josep Maria Cervelló, experto en carst; Pere Izquierdo, arqueólogo subacuático, y el geólogo Raúl Cano. Moderará la historiadora Elicinia Ferro, del Centre d'Estudis Beguetans.

Los impulsores de la mesa redonda han invitado a los vecinos de los municipios directamente afectados, como son Begues, Gavà, Sitges y Olivella, además de representantes municipales y miembros del AMB.