Aunque la subida del recibo de la luz a principios de año ha eclipsado cualquier otra información sobre el sector de la energía, también hay buenas noticias que tienen que ver con mejoras en el suministro eléctrico. Una de ellas es que Endesa sigue adelante con la ejecución de su Gran Plan de Calidad, lo que ha permitido que durante el año 2020 se instalaran 98 sistemas de telecontrol en los centros de transformación que la compañía opera en el Baix Llobregat.
El nuevo operativo automatizado reduce en un 20% los tiempos de interrupción del servicio en caso de incidencias, lo que asegura la continuidad en el suministro de electricidad a los clientes. La mercantil eléctrica ha invertido dos millones de euros en la instalación de los nuevos dispositivos de control.
La mejora en la gestión de los transformadores la red de Endesa permitirá a la compañía accionar a distancia los dispositivos de maniobra desde el centro de control de tiene a Barcelona. Así, no hará falta desplazar a los equipos técnicos hasta los centros de transformación para que los pongan en marcha en el caso de que se detecte cualquier contratiempo, ya sea provocado por la propia red o externo.
Localización de averías
Gracias a la mejora tecnológica, el centro de control barcelonés puede recibir información sobre el estado de la red y al mismo tiempo detectar y aislar los defectos que se puedan producir en el suministro de electricidad, y de esta forma ahorrar tiempo en la localización de las averías.
La reforma que se ha puesto en marcha representa solo la punta del iceberg de la transformación que Endesa está llevando al cabo en los últimos años, en los que se ha fijado como prioridad “invertir en la tecnificación de la red para adaptarla a los avances tecnológicos y para dar una respuesta adecuada a las necesidades que requiere el territorio y el mercado”, han explicado fuentes de la compañía. Con este tipo de iniciativas de automatización, la empresa pretende avanzar en la creación de smart grids o redes inteligentes.
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