El Ayuntamiento de Viladecans ha informado de que sustituirá un total de 959 puntos de luz que no son lo suficientemente eficientes, una actuación que prevén terminar antes de que termine el año. Esta cifra representa el 9,5% de luces de la vía pública y, según ha señalado la auditoría energética, se estima que gracias a este cambio el ahorro energético que se alcanzará en estos puntos llegará al 62%. Además, a través de este cambio el consumo energético de todas las farolas de la ciudad bajará un 12%, lo que supondrá evitar la emisión de 98 toneladas de CO2 al año.
Hace más de una década que el Ayuntamiento de Viladecans empezó a luchar para mejorar la eficiencia energética del alumbrado con la incorporación, especialmente, de luces LED, algo que se ha ido extendiendo poco a poco por la ciudad y en lo que siguen trabajando a día de hoy.
El nuevo contrato de mantenimiento del alumbrado público de Viladecans, el cual ha entrado en vigor este mes de mayo, incluye como novedad la inversión de 350.000 euros para esta actuación. En concreto, el 90% de los puntos de luz se sustituirán por LED, mientras que la resta de luminarias se cambiará por lámparas y equipos de menor potencia, manteniendo o mejorando la sensación lumínica. La auditoría ha calculado que esta inversión se recuperará en pocos años y que se ahorrará en el consumo.
Los puntos de luz de menor rendimiento que se sustituirán se encuentran, en gran medida, en zonas industriales como los polígonos Centre, Can Calderon y Parc de Negocis, ya que cuentan con farolas más altas que necesitan más potencia. Además, también se cambiarán las luminarias obsoletas de elevado consumo en barrios como Can Sellarès, Can Palmer, Torrent Ballester, Sant Jordi – Gabrielistes y Tore-roja. Finalmente, las lámparas contarán con un sistema por el que, a partir de la madrugada, reducirán automáticamente un 20% la potencia para ser más eficientes sin afectar las necesidades de iluminación, ya que durante este horario la circulación es más escasa.