El plato fuerte del pleno municipal de Sant Boi del pasado 20 de diciembre fue una moción sobre 'Las construcciones y cultivos en el Parc Agrari
En el Pleno municipal, del 20-12, breve y sin interrupciones intempestivas, había lo que los militares, definen como “fatiga de combate”; porque el tenso ambiente de la “gran política” no se reflejó apenas en la sesión última del 2022. No creo que fuera por la Navidad inminente. Me explicaré. Hubo una lectura pro-Derechos humanos, del sr. Carcelén, bien leída, sí señor, pero sin más. Siguió la lista de feminicidios, con las cautelas preceptivas.
E irrumpió el- plato fuerte de la sesión-, una moción PSC-Comuns, con 14 páginas de detalladas normas para “Las construcciones y cultivos en el Parc Agrari de Sant Boi”. Sorprende que un momento pre-agónico de la actividad agraria en nuestra zona, con un intenso proceso comunicativo, de desmentidos continuos; por parte de la “nomenklatura” tecno-política de la Sra. Jordá consellera y el alcalde de El Prat, -partidarios de la ZEPA y contrarios al Aeropuerto-, por una parte y de los tres alcaldes de Gavà, Viladecans y Sant Boi, opuestos con diferentes grados a la ZEPA y no contrarios al aeropuerto ampliado.
Sorprende, insisto que surja al final del año, esta prolija nueva reglamentación que complica aún más, la profesión payesa. Pero ahí está, presentada casi en secreto y anticipándose a la del Área Metropolitana de Barcelona (AMB). ¿Por qué, si hace semanas Sant Boi, junto a Gavà y Viladecans, se pronunciaba en favor de los ‘hubs’?. Y una Presidenta Comarcal y el alcalde Carles Ruiz de Viladecans, consideraban la posibilidad de autorizar almacenes agroindustriales, para valorizar el producto agrario final.
Temor al cáñamo
Misterio, o no, durante días, se habían producido llamadas e informaciones avisando de que la verdadera razón era el temor a que proliferara de nuevo en el Parc Agrari (hubo 10 hectáreas) el cáñamo industrial y médico, pendiente de aprobar en Madrid. La ¿inseguridad? tenía que ver con limitaciones al riego, instalaciones eléctricas; las Placas solares; el catálogo de cultivos… y pormenores edáficos. Ante un tamaño asunto, no negociado y peor explicado, voté abstención, como toda la oposición, menos ERC, negativamente.
De forma meliflua, se concedieron dos meses para alegar, antes de su aprobación por mayoría mecánica. Pienso en nuestros cultivadores del Parc Agrari y, a la vez, mi mente se va la unidad de paliativos del Parc Sanitari. Ellos van a recibir las últimas puñaladas con sus 50-60 años -son prejubilables de facto- con lesiones profesionales muchos, endeudados algunos. ¡Vaya final que se les prepara! Sin “Plan social” ni compensaciones. Expropiados gratis.
En contra de los Presupuestos
Pasamos a la aprobación de los Presupuestos, son 103 Millones de euros. ¿Motivo de disgusto? Casi siempre, porque siguen arrastrando cargas pesadas de otras gestiones pasadas. De varios terrenos no edificados, los Parkings, el cine Castellet… Son proyectos que adolecen de defectos legales iniciales, que impiden su pleno uso, control, venta o alquiler. No podemos hablar solo de contabilidades del presente sin sanear los pesados arrastres de lucro cesante, sin resolver aún. La gasolinera de Lliçà de Vall es un caso aparte, sin idea de economía social alguna. ¡Qué somos los segundos en pobreza comarcal, como para invertir en ayuntamientos ricos! Voté en contra, con toda la oposición.
Hubo un acuerdo-moción sobre las condiciones laborales con los funcionarios municipales. El Gobierno central limitará las condiciones de prejubilación y me parece contradictorio. Me abstuve, con toda la oposición.
Consejo Local de Medios
-Control. Como en la antigua ágora, tú pregunta y veremos si respondo. Demandé al Sr. Aguilá la Constitución de un Consejo Local de Medios, como existen en muchas ciudades grandes. No recordaba nada y consideró que la proximidad electoral, era contraproducente. Son pobres respuesta de un edil joven cada vez más “profesionalizado”.
-Pedí a nuestra edil médica y hacendista, una delegación del Centro de Adicciones de L’Hospitalet para Sant Boi y su zona de influencia. La respuesta fue que no era posible. La salud mental es en Sant Boi la gran empleadora local. Hemos de ser algo más que una Terminal para agudos, sub-agudos, penados y delincuentes.
Sin multas por el catastro
-Sobre las alteraciones catastrales 2014-18; sobre cerramientos, edificaciones ilegales, nuevas construcciones o ampliaciones, incluso piscinas ilegales -que han recaudado millones en todo el país- resultó que Sant Boi no recaudó, ni multó y que todo es conforme a la ley, según una foto por satélite mensual, que lo confirma (?).
Claro, qué me había de decir el sr. Aguilá, si no es su tema. Pensemos lo peor, ningún euro de multa y los cerramientos y ampliaciones por el “morro”, pasan desapercibidas.
-Sobre el posible asesoramiento legal a las familias endeudadas por parte de la OMIC, OMAP, Síndica y Servicios Sociales, el sr. Tamayo, contestó “que ya se hace”.
Nadie es profeta
Acabado el Pleno se nos invitó a un cava, pero sin turrones. Y eso que el sr. Velasco (RIP) con sus turrones Vicens, puso el pabellón muy alto, pero ya se sabe nadie es profeta en su pueblo. Tal vez las alcachofas, para otro año.