El temporal Gerard envía a pique las playas de Gavà-Mar

Dice el refrán que “a perro flaco, todo son pulgas” y, como siempre, la sabiduría popular no se equivoca. La prueba de ello está en Gavà, donde ha llovido sobre mojado, y nunca mejor dicho. El último temporal de viento –bautizado como Gerard– ha rematado a las nimias playas de Gavà-Mar, que ya resultaron seriamente dañadas con los temporales del pasado otoño, pocos meses después de haber sido reconstruidas con arena procedente del fondo marino de Port Ginesta (Garraf).

La nueva tempestad, que tuvo su punto álgido este martes, ha destrozado la pasarela peatonal de madera que funciona como acceso y ha dejado al descubierto la cimentación de la zona de ducha. Las olas han engullido la poca arena que quedaba, como puede apreciarse en las fotos que acompañan esta información, y también han dado un buen mordisco a las dunas, que ahora parecen acantilados cortados a pico.

El azote de las tempestades, que se llevan la arena de la costa de Gavà –y también de las de El Prat– no sería tan preocupante si la ampliación del Port de Barcelona –y la construcción de un muelle de un kilómetro de largo sobre la desembocadura del río Llobregat- no hubiera modificado las dinámicas marinas. Y es que, en circunstancias normales, la arena que se llevan los típicos temporales de otoño e invierno se recuperarían en primavera gracias a las corrientes marinas.

Aporte natural que no llega

Pero el obstáculo del Port ha dinamitado desde hace años “el aporte natural de arena a las playas que arrastraban las corrientes a partir de marzo o abril y que ya no llega”, como ha reconocido a El Llobregat Rosa María Fernández, teniente de alcalde d’Urbanime, Habitatge i Sostenibilitat Ambiental de Gavà en una reciente entrevista.

Por ahora la única solución que se ha idea para frenar la regresión del litoral es la reposición de arena de las playas ‘a lo ancho’ (más espacio para los bañistas) procedente del dragado de Port Ginesta. Pero este ‘parche’ no sirve prácticamente de nada porque en cuánto vuelve la temporada de tormentas, adiós playa. Y no es solo el adión 'temporal' de la época que baños, que concluye oficialmente en octubre.

Refuerzo de las dunas

Algo más efectivo contra las mordidas en la costa se ha demostrado que es una reconstrucción ‘a lo alto’, es decir, formando nuevas dunas o reforzando las existentes. “Se ha detectado que si hay una mayor altura de arena en la playa –como las dunas-, el temporal no puede arrasarla por completo”, explica la teniente de alcalde de Gavà. De hecho, el sistema dunar protege la costa porque dificulta la erosión. Sin embargo, ni las dunas han podido impedir que la playa de Gavà pierda entre 1,5 y 2 metros de anchura.

Rosa María Fernández insiste en que el objetivo a corto plazo es lograr “estabilizar las playas existentes”, por lo que se apuesta por reforzar las dunas en lugar de pretender ganar más terreno para las toallas y las sombrillas. Pero aun así hay un déficit entre la arena que se lleva la tempestad y la que se bombea desde la draga, unos 26.000 m3 en 2022. “Gavà necesita una aportación extra de 40.000 m3 anuales de arena”, insiste la edil. Prácticamente el doble de lo que se aporta

Hacia el sur

Episodios dantescos como los provocados por el temporal Gerard en Gavà-Mar hacen que la preocupación en el territorio vaya en aumento. Y es que, por si fuera poco, el impacto de la pérdida de playas no es fijo. En 2015, las borrascas castigaban con más crudeza las playas del más próximas a Viladecans mientras que en 2022 el tramo más perjudicado ha sido el central, a la altura de la calle Palafrugell. Al parecer, la regresión costera se va desplazando lentamente hacia la riera de Canyars, situada al sur, en el límite con Castelldefels, han asegurado fuentes municipales.

Por ahora, la única solución que se atisba en el horizonte son las medidas estructurales, algo que está sopesando el estudio recién encargado por el Ministerio para la Transición Ecológica (Miteco). Está previsto que la redacción de este informe definitivo se adjudique en los próximos días.